Luego de la lamentable partida de su esposa, la productora y cineasta Mónica Abín en 2017, Eduardo Videgaray se enfrentó al reto de continuar con la crianza de su hija Andrea, que en aquel entonces entraba a la adolescencia, en solitario. Una tarea que parecía difícil de cumplir, pues en medio de su dolor, el presentador tuvo que llenarse de valor para hacer frente a su nueva realidad y sacar adelante a su hija. Algo que por fortuna ha conseguido con éxito, pues actualmente mantiene una relación sumamente cercana con la jovencita. Algo de lo que habló durante su reciente paso por el programa Pinky Promise de Karlita Díaz, en donde con total sinceridad se refirió a esta dura etapa de su vida.
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El reto más importante
Durante una dinámica de preguntas y respuestas dentro del programa, Eduardo decidió hablar respecto a la partida de Mónica y a la forma en la que hizo frente, de la mano de su hija, a esta situación. “Ante la pérdida de quien fue tu esposa, ¿cuál ha sido el reto más fuerte al que te enfrentaste como papá soltero?”, fue el cuestionamiento que uno de los fans del programa lanzó al también locutor de radio, la cual respondió con total sinceridad y con los sentimientos a flor de piel. “El reto más importante, al principio, fue sobrevivir cada día”, comentó conmovido.
Fue entonces que se refirió a su hija Andrea, con quien a través de los años a logrado conectar en todos los sentidos, lo que les ha permitido forjar una relación sumamente cercana y de mucha confianza. “Posteriormente, lograr vincularme con mi hija, que se estaba convirtiendo en adolescente, y que no se perdiera ese contacto entre nosotros, que creo yo, he salido adelante airosamente, porque tenemos una relación muy cercana y muy bonita”, comentó Videgaray orgulloso.
En ese instante, Eduardo fue interrumpido por su fiel compañero en la televisión, José Ramón San Cristobal ‘El Estaca’, quien reconoció la fortaleza y entereza que su colega mostró a lo largo de todo el proceso de duelo que enfrentó durante la enfermedad de Mónica y tras su fallecimiento. “No sabes cómo lo admiro, Eduardo iba a los programas a echar risas, a echar desma***, y estuvo ahí todo el tiempo de un proceso horroroso, horrible, yo quería a Mónica muchísimo, y bueno, no me imagino lo que ha de haber sentido, pero él está hecho de otra madera”, compartió el presentador.
En ese mismo sentido, Videgaray reconoció que fue precisamente el trabajo lo que lo ayudó a mantenerse sereno y enfocado durante esa dura etapa de su vida, algo por lo que se mostró sumamente agradecido. “En esa época, para mí, mi terapia era mi trabajo, o sea, yo a veces iba del hospital a La Corneta, al radio, y ahí llegaba y cambiaba el switch, y eso me mantenía vivo, me permitía pensar en otras cosas… El trabajo ennoblece, a veces”, finalizó.
¿Cómo es la relación de Sofía Rivera Torres y la hija de Videgaray?
Luego de haber enfrentado la partida de Mónica Abín en conjunto, se integró a la familia unos años más tarde Sofía Rivera Torres, quien actualmente es esposa de Eduardo Videgaray. Y aunque en un inicio era incierto si la jovencita lograría conectar con la nueva pareja de su papá, el tiempo hizo que Sofía y Andrea se volvieran muy unidas y lograran construir una relación sumamente cercana, en la que el amor que ambas se tienen ha sido su principal fortaleza. Algo de lo que la guapa presentadora hablo durante su visita al programa Pinky Promise hace algunos meses, en donde resaltó la gran relación que tiene con la hija de su marido. “Lo más bonito que me ha pasado en la vida ha sido mi hijastra, la verdad. Fue una súper sorpresa que me dio la vida, yo sé que ella no la tuvo nada fácil. El papá de Eduardo falleció cuando él tenía 10 años y cuando su hija tenía 10 años también su mami murió de cáncer, como que vivieron la misma historia. Yo llegué a su vida dos años después y como que me tocó toda esa parte, de que ella iba entrando en la adolescencia, de que necesitas a una mujer ahí”, contó. En esa entrevista, Sofía reveló cómo su papel con la hija de Eduardo la ha hecho cambiar: “Se me empezó a quitar un poquito el miedo de ser mamá y me di cuenta que es algo que me gusta y que soy buena”.
