Aunque han sido meses complicados para Bárbara Bermudo y su familia, las cosas se han ido acomodando y poco a poco superan juntos las adversidades. La presentadora inició el año decidida a ver por su salud y retirarse los implantes de senos que tanto la hicieron sufrir por la Breast Implant Illness, y ahora empieza a ver los resultados positivos no sólo en su salud, sino en su físico. Emocionada por su nueva figura lejos de problemas que le impedían disfrutar de la vida como tanto quería, ahora Bárbara se siente más contenta en su propia piel, y camino a la playa mostró lo bien que luce.
“Después de varias semanas un poco aislada por un proceso que me tocó vivir que luego compartiré, les cuento que me siento mucho mejor y lista para el verano”, contó en una de sus publicaciones en las redes sociales, en donde se sinceró sobre los cambios que ha tenido luego de su recuperación y lo bien que se siente después de la explantación.
“Hoy por primera vez me siento cómoda luciendo mi traje de baño. Muchas me han enviado preguntas, inquietudes y han expresado su miedo. Tres meses después me siento feliz de los resultados pero lo más importante recuperar poco a poco mi salud”, agregó sonriente desde el auto en el que estaba acompañada por sus hijas Mia, Camila y Sofia.
“Les deseo un feliz sábado y aquí estoy para pronto contestar preguntas sobre el síndrome de Asía, la explantación y lo más importante lo que necesitamos saber para llevar una vida más saludable”, adelantó para quienes se encuentran en la misma situación que ella vivió meses atrás y buscan un consejo.
El largo camino de Bárbara Bermudo hacia una recuperación exitosa
En febrero, la presentadora de TV abrió su corazón para confesar a su público los malos ratos que había estado pasando desde hace años. Problemas de salud, cambios de humos y una desesperación que no la dejaba dormir eran sólo algunos de los síntomas que tenía y que la hicieron darse cuenta de que su cuerpo le estaba enviando un mensaje muy importante. Gracias a una investigación personal y charlas con personas allegadas, como Giselle Blondet, que han pasado por lo mismo, Bárbara por fin tomó la decisión de la explantación.
Bárbara abrió su corazón para contar que hace 17 años tomó la decisión de ponerse implantes, y con el paso del tiempo y su experiencia como mamá, no los reemplazó a los 10 años como es recomendable, algo que poco a poco la fue afectando. “Empezaron mis síntomas. Yo diría que de los 150 que dicen que generan los implantes mamarios, que están llenos de material tóxico, yo puedo decir que tengo aproximadamente 70, y ha sido una tortura en los últimos tres-cuarto años”, explicó.
Después de la cirugía, aseguró que las cosas empezaban a mejorar y los síntomas poco a poco desaparecían, dejándola más tranquila. Y hoy la podemos ver luciendo un traje de baño, muy contenta por haber puesto antes que nada su salud y bienestar.