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Antes de El Gordo y la Flaca, Raúl de Molina tenía una carrera como paparazzi. El comunicador hacía las fotos más espectaculares de las celebridades y en una de las tantas anécdotas que tiene en su haber, fue el día que fotografió a la princesa Diana usando un bikini diminuto en sus vacaciones por el Caribe. La imagen, la cual no fue nada fácil de obtener, le costó que los guardacostas y los guardaespaldas de ‘Lady Di’ se fueran casi sobre de él, pero al final, logró una buena toma y sus fotos fueron retomadas en todos los medios a nivel mundial.
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Así se planeaban las fotos; los guardaespaldas lo acordaban con los fotógrafos
Raúl de Molina detalló que, como él vivía en Miami, se adelantaba a otros compañeros del medio, alquilaba los botes y todo lo neceario. “Tomábamos las fotos desde los barcos, ella jugando con sus hijos con el príncipe Harry, con su hermano...”, dijo a las cámaras de Univision en una entrevista en 2017.
Raúl explicó que muchas de esas fotos eran preparadas, pues se llegaba a un acuerdo con el equipo de seguridad de Diana. “Ella viajaba con dos guardaespaldas y cuando ella llegaba, los guardaespaldad venían a reunirse con los fotógrafos y uno de ellos nos decía: “’Déjenla tomar el sol por cuatro o cinco días, les vamos a decir el horario, quizás entre 10 y 11 de la mañana , van a estar por 20 minutos, pueden tomarle fotos a ella y después se van y no me la molesten más”.
Luego de hacer unas cuantas tomas, los fotógrafos abandonaban el lugar y disfrutaban de las delicias de la playa en otra de las islas, pero un día, Diana hizo algo fuera de lo común y eso los obligó a romper el acuerdo con los guardaespaldas.
La foto del bikini rojo
“En una ocasión, después de que los botes se fueron, ella se cambió y se puso un bikini pequeñito”, contó Raúl. Como era de esperarse, todos los botes regresaron con los fotógrafos para captar a la princesa de Gales en bikini. “Todos volvemos con los botes a tratar de fotografiarla de lejos y los guardacostas se nos tiran encima porque dijeron que ya se había terminado el tiempo y que no podíamos fotografiarla con ese bikini”.
Pero Raúl de Molina no desistió y logró unas buenas fotos de la princesa Diana en bikini. “Las fotos mías no solo salieron en los periódios de Inglaterra, sino que le dieron la vuelta al mundo”.
Isla Necker, el refugio de Diana en el Caribe
El presentador contó que Diana de Gales solía vacacionar en la Isla Necker, una de las tants que forman las Islas Vírgenes Británicas, en el Caribe. Contó que la royal solía vacacionar en ese lugar entre siete y nueve días, siempre son sus hijos, los príncipes William y Harry, además de otros familiares, pero jamás con el entonces príncipe Carlos. “En aquel momento, la princesa tenía miles de problemas con Carlos, que era su esposo, no se llevaban bien, era algo muy raro pero cuando ella se iba de vacaciones, se iba con su madre con sus hijos, pero el príncipe Carlos nunca venía”, dijo.