Shakira ‘pasa la página’ con Piqué y se derrite de amor por sus hijos en ‘Acróstico’

“Me enseñaste que el amor no es una estafa, y que cuando es real no se acaba”, se escucha en el primer verso de Acróstico. Puede que la cantante haya sufrido una traición con su pareja, pero de sus hijos jamás, por lo que se entiende que el amor de madre e hijos es auténtico y real.

“Intenté que no me veas llorar, que no vieras mi fragilidad, pero las cosas no son siempre como las soñamos. A veces corremos, pero no llegamos”, se escucha en otro verso. Justo como Shakira dijo el año pasado en una entrevista para ELLE, ella trató de proteger a sus hijos a toda costa. “He tratado de ocultar la situación frente a mis hijos. Intento protegerlos, porque esa es mi prioridad en la vida. Pero luego, en el colegio, escuchan cosas de sus amigos o se encuentran con noticias desagradables en internet, y simplemente les afecta”, contó en ese entonces.

En otro verso, Shakira promete a Milan y Sasha estar siempre para ellos cada vez que la necesiten. “Nunca dudes que aquí voy a estar. Háblame que te voy a escuchar...”, y así ha sido. Desde que se supo la noticia de la ruptura con Gerard Piqué, Shakira se volcó en sus hijos para cuidarlos y estar a su lado, pues la separación fue de lo más mediática y por supuesto que tocó las fibras más sensibles de los niños.

“Y aunque la vida me tratara así, voy a ser fuerte solo para ti”, se escucha en otro fragmento de la canción. Y sí, Shakira vaya que ha sido fuerte. En la entrevista con ELLE, contó que solo quería quedarse acurrucada con sus hijos, pero que sabía que tenía responsabilidades y cosas por hacer. “Solo quería quedarme en la cama, acurrucada con mis hijos. Pero tenía que levantarme, grabar un video y cumplir con mis obligaciones”, dijo en una entrevista.

“Lo único que quiero es tu felicidad y estar contigo. La sonrisa tuya es mi debilidad. Quererte sirve de anestesia al dolor, hace que me sienta mejor. Para lo que necesites estoy. Viniste a completar lo que soy”, dice Shakira en su balada. Y no hay nada más cierto; Milan y Sasha han sido su refugio a lo largo de estos duros meses.

“Se nos rompió solo un plato no toda la vajilla”, apunta la cantante, haciendo referencia al fracaso de su relación con Piqué tras 10 años juntos. A pesar de esto, la colombiana está clara en que saldrá adelante y sanará sus heridas.

También habló del perdón y de cómo quiere que sus hijos lo aprendan. “Y aunque no sé poner la otra mejilla, aprender a perdonar es de sabios, que solo te salga amor de esos labios”.

En otra parte de la canción, la cantante habló de afrontar los problemas, quizá esto como un ‘dardo’ hacia su ex, con el que pudo haber arreglado su relación, pero al final, tomaron caminos separados. “Si las cosas se dañan no se botan, se reparan, los problemas se afrontan y se encaran”.

En otro verso, Shakira –ya un poco más serena sobre su situación personal—la cantante admite que no queda otra más que tomar con gracia las dificultades. “Hay que reírse de la vida, a pesar de que duelan las heridas. Si ha de entregar entero el corazón, aunque le hagan daño sin razón”.

Eso es precisamente lo que ha hecho la cantante; ha puesto tierra de por medio y se ha mudado a Miami con los chicos, donde ha empezado una nueva vida.