Mañana será uno de los días más importantes en la carrera de Saúl El Canelo Álvarez quien, luego de 12 años de no pelear en nuestro país, regresa por la puerta grande para protagonizar una de las peleas más importantes del año. Este encuentro no sólo representa su retorno a México, sino que lo hace en su ciudad natal, Guadalajara, donde tendrá lugar su contienda con John Ryder, que tendrá lugar nada más y nada menos que en el Estadio Akron, la casa de las Chivas. Previo al encuentro, esta tarde se realizó la ceremonia de pesaje, evento al que El Canelo arribó en compañía de su familia, su esposa, Fernanda Gómez, y sus hijas, María Fernanda y Emily, la mayor.
MÁS NOTAS RELACIONADAS
- 'Me dio una parálisis facial no hace mucho', el Canelo habla por primera vez de esto con el Chicharito
- El Canelo Álvarez y Fernanda Gómez dan lección de estilo en el partido de los Lakers
A su llegada al Teatro Degollado, edificación que es considerada Patrimonio Cultural de la Humanidad y que por primera vez en su historia abrió sus puertas para un evento deportivo, El Canelo se mostró muy entusiasmado de poder llevar a Guadalajara un evento de talla mundial como este: “Bien, contento de estar aquí, agradecido con la respuesta de la gente, saludos a todos y gracias por su apoyo”. Siguiendo los pasos del boxeador, vimos a las “mujeres” del campeón mundial: su esposa y sus dos hijas, quienes, como acostumbran a hacer en cada pelea, llevaron atuendos idénticos en color blanco firmados por Dolce & Gabbana.
Como pocas veces, Emily, su primogénita, habló con la cámara del programa El Gordo y la Flaca: “Claro, ya estoy lista”, comentó la joven de 15 años de edad. Feliz de poder acompañar a su papé en este importante acontecimiento en su carrera, añadió: “Le quiero desear toda la suerte del mundo y esperamos la victoria”. Por último, la hija mayor del boxeador confesó que apoya incondicionalmente a su papá: “Yo siempre voy a estar ahí para él, apoyándolo en las buenas y en las malas, siempre”. Por su parte, la esposa del pugilista, también aprovechó su encuentro con la prensa para expresarle su públicamente su cariño: “Lo amamos y somos sus fans número uno”.
Fernanda Gómez, quien lució guapísima con el atuendo que eligió el staff de El Canelo para esta pelea, la tapatía destacó la importante de un evento de esta magnitud en el estado: “Mucho éxito, ojalá nos vaya muy bien y espero que toda la gente disfruta de aquí de Guadalajara”, comentó. Por último, la esposa del boxeador compartió que a pesar de que en las últimas semanas, Saúl Álvarez estuvo concentrado preparándose para esta pelea, estuvieron en comunicación constante: “Sí, todos los días (hablamos), todo el tiempo”, puntualizó. En la ceremonia de pesaje también estuvo presente el Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y el cantante Beto Vega, quien será el encargado de entonar el Himno Nacional.
Su familia, el mejor apoyo del boxeador
Además de su esposa y sus hijas, El Canelo ha contado con el apoyo incondicional de toda su familia en Guadalajara, razón por la que sus papás, sus hermanos, cuñadas, sobrinos, tíos y el resto de los Álvarez tuvieron un lugar reservado en la primera fila. Para el boxeador pelear en su tierra, frente a los suyos es ya una victoria, pues lo hace recordar todo le sacrificio, disciplina y entrega que ha puesto para convertirse en el campeón del mundo. Hace unos días, a través de la plataforma NMás, el señor Santos Álvarez Barragán, papá de El Canelo, compartió algunos detalles de la infancia del boxeador: “Nos manteníamos de la paletería, él me ayudaba siempre a vender. Nunca renegó, fue muy tranquilo obediente”, comentó. El padre el boxeador recordó cuando su hijo vendía paletas de hielo en el transporte público: “Cuando salían al camión, yo les daba mitad y mitad”, recordó don Santos quien reveló que fue uno de sus hijos mayores quien llevó a El Canelo a entrenar box por primera vez.