Estos son los looks más extravagantes y costosos de todos los tiempos en la Met Gala

Cher dejó boquiabiertos a todos en la Met Gala de 1985 con un look inspirado en la exposición “Trajes de la India Real”. Con un atrevido y brillante unitard, cubierto de lentejuelas, y un llamativo ojo ahumado lavanda clásico de los años 80, la diva se robó todas las miradas esa noche. Su look fue una mezcla perfecta de sofisticación y osadía que hasta la actualidad sigue siendo recordado como uno de los más icónicos en la historia de la gala.

Para su primera y única aparición en la Met Gala en 1996, la princesa Diana sorprendió a todos con su vestido azul marino de la colección de alta costura de John Galliano. El diseño estaba confeccionado con una seda exquisita y presentaba un escote en V profundo, que estaba en línea con la moda de la época. Lo combinó con un collar de perlas y pendientes de diamantes para completar su elegante look. Lo que más llamó la atención fue la confianza y el encanto que emanaba la princesa al lucirlo, convirtiéndose en una de las apariciones más memorables en la historia.

En ese año, la actriz mexicana deslumbró a todos con un impresionante vestido de alta costura de Versace que resaltaba sus curvas y su belleza latina. La prenda estaba adornada con cristales y su diseño en forma de espiral creaba un efecto visual impactante. Hayek demostró que la elegancia y el glamour no tienen fronteras y que la moda es un arte que se puede dominar sin importar la procedencia. Su presencia en el evento fue una verdadera celebración de la moda y de la belleza latina.

Beyoncé hizo su aparición en la gala del Met de 2015 con un vestido de Givenchy que parecía inspirado en la dinastía Qing, una referencia sutil al tema de la noche “China: Through the Looking Glass.” El vestido estaba adornado con bordados y pedrería que evocaban la opulencia de la cultura oriental. La cantante, que llegó tarde al evento, no dejó de impresionar con su atrevido vestido que mostraba la piel con transparencias en lugares estratégicos. ¿Quién hubiera pensado que este sería su penúltimo año asistiendo al evento de la moda más importante del año?

El icónico vestido amarillo de Rihana en la Gala Met del 2015 fue sin duda una de las piezas más memorables en la historia del evento. ‘Bad Girl Ri-ri’ decidió rendir homenaje a la cultura china con un impresionante vestido diseñado por Guo Pei. La pieza era una obra de arte con una cola de más de 13 pies de largo y un intrincado bordado a mano que representaba la flora y fauna china. Rihanna realmente se destacó en la alfombra roja de ese año, y su elección de vestuario vivirá por siempre en el mundo de la moda.

La Met Gala del 2016 nos dejó uno de los looks más mágicos y deslumbrantes de todos los tiempos: el vestido de Claire Danes diseñado por Zac Posen. Inspirado en el cuento de hadas de Cenicienta, el vestido se iluminaba en la noche con luces LED integradas en su estructura. La creación de Posen era un homenaje a la tecnología y la moda, combinando a la perfección la elegancia y la innovación. Claire Danes se convirtió en la princesa moderna que todos soñábamos en aquella noche, dejando a todos los presentes boquiabiertos con su belleza y estilo.

Katy Perry llegó a la Gala del Met de 2017 con un vestido que desafiaba las expectativas de todos los asistentes. Diseñado por John Galliano para Maison Margiela, el impresionante traje rojo de seda era una amalgama de detalles increíbles y técnicas de costura innovadoras, con una capa de red sobre el vestido para crear un efecto voluminoso y dramático. Pero lo más impresionante de todo fue el espectacular velo de encaje que cubría su cabeza y el rostro, lo que agregó un elemento de misterio y drama a su apariencia general. Esa noche, Katy Perry se coronó como una de las celebridades más creativas y atrevidas del mundo de la moda.

En el 2018, con la temática religión católica y moda, Bella Hadid optó por un look atrevido diseñado por Gareth Pugh para Chrome Hearts, que destacó entre los demás asistentes. El vestido negro compuesto de falda larga y corpiño brillante palabra de honor, se combinó con una chaqueta de manga corta y hombros redondeados, que parecía estar hecha de una piel mate. Para añadir aún más drama al atuendo, la modelo lució una capa translúcida ribeteada en dorado, que en realidad es un adorno de pelo que está cosido a su cabello.

Blake Lively fue la co-anfitriona de la Gala del Met en el año 2018, y sin duda hizo una entrada impactante. Lució un espectacular vestido rojo de Versace, con un diseño intrincado que consistía en más de $2 millones en joyas de Lorraine Schwartz. La actriz había revelado previamente que su vestido tardó más de 600 horas en crearse, y el resultado final fue impresionante. El vestido era una mezcla perfecta del tema de la gala “Cuerpos Celestiales: Moda e Imaginación Católica” y la estética de la serie Juego de Tronos, con un corpiño dorado incrustado con joyas que acentuaba perfectamente la figura de Lively. La falda tenía un profundo tono rojo rubí con dos paneles transparentes y bordados dorados. Y para rematar su look, Lively llevaba una diadema que la hacía parecer un ángel en la tierra. 2019

En 2019, Cardi B demostró una vez más que es una de las más atrevidas en cuanto a moda se trata, ya que no decepcionó en el tema de “camp” de la Met Gala. La rapera lució un vestido gigante de plumas de Thom Browne que rodeaba su cabeza y tenía mangas que llegaban hasta las puntas de sus dedos. El vestido de cuello alto estaba adornado con 30,000 plumas y requirió 2,000 horas de trabajo y 35 personas para su creación. Además, su bodice personalizado contaba con 44 quilates de rubíes que hacían las veces de cubre pezones y valorado en US$250,000, en colaboración con Stefere Jewelry. El tren del vestido se extendía 10 pies de largo y se necesitaron cinco personas para llevarlo por las escaleras de la Met.

Lady Gaga llegó al Met Gala 2019 vestida con un enorme vestido rosa fucsia de cuello alto, mangas abullonadas y una larga cola. Pero eso no era todo, ya que la cantante nos sorprendió no con uno, ni con dos, ni con tres, ¡sino con cuatro cambios de looks! En su segundo look, Lady Gaga llevó un vestido negro ceñido al cuerpo con una sobrefalda gigante en el lateral. Su tercer estilismo era un diseño satinado minimalista de tirantes espagueti a juego con el primer look. Y para su última transformación, Lady Gaga se puso un conjunto lencero negro con botines de plataforma infinita y una carretilla llena de vino y sombreros estilo cowboy.

En la Gala Met del 2019, Zendaya sorprendió a todos con su espectacular vestido de Cenicienta. El diseño, hecho a medida por Tommy Hilfiger, se iluminó como un árbol de Navidad gracias a su estilista Law Roach, quien se vistió como su hada madrina. La combinación perfecta entre estilo y espectáculo, encajando perfectamente con el tema de la noche “Camp: Notes on Fashion”. Zendaya y su vestido de cuento de hadas dejaron a todos maravillados en la alfombra roja.

En la Gala Met 2021, la estrella pop Billie Eilish sorprendió a todos al aparecer en la alfombra beige luciendo un vestido de gala de tul melocotón a medida de Oscar de la Renta. Su vestido causó revuelo y recibió elogios, pero también generó un cambio social. Como resultado de su uso de la pieza, la casa Oscar de la Renta acordó que sus diseños estarían libres de pieles de animal. Y no solo hizo historia por eso, sino porque a sus 19 años, ¡se coronó como la co anfitriona más joven de la gala!

Kim Kardashian llegó a la alfombra roja de la Met Gala 2022 luciendo un peinado rubio platino y un icónico vestido que inmortalizó Marilyn Monroe. La socialité hizo historia al utilizar el mismo vestido de Jean Louis que la famosa rubia usó para cantarle “Feliz cumpleaños, Sr. Presidente” a John F. Kennedy en su celebración de cumpleaños número 45 en el Madison Square Garden en 1962. El diseño ceñido al cuerpo que tiene incrustaciones de cristales es conocido como el más caro del mundo y estableció un récord Guinness cuando Ripley’s Believe It or Not! lo adquirió en una subasta por US$4.8 millones.