Como nunca, Maite Perroni se sinceró sobre su infancia, los retos que vivió a su paso por Rebelde, además de los erorres más comunes que ha cometido a nivel emocional. En una amena conversación en el podcast El Rincón de los Errores de su amiga, la actriz Marimar Vega, y el conferencista Efrén Martínez, la integrante de RBD habló desde lo más profundo de sus emociones.
La también actriz de Oscuro Deseo recordó lo duro que reveló lo duro que fueron sus inicios en la industria del entretenimiento. “Recuerdo cuando yo estaba empezando mi primer proyecto importante, nadie se imaginó que iba a suceder así y sí había una dinámica en donde constantemente te hacían sentir que daba igual si tú estabas o no estabas; que no tenías un valor, el valor lo tenía el proyecto, no tú ”, dijo Perroni, de 40 años.
Sin referirse en específico a un proyecto, Maite, quien dio vida a Lupita en la telenovela Rebelde, agregó: “Si tu querías no estar, tan simple como un día me dijeron, ‘no importa le pintamos el pelo a alguien más de negro y se lo alaciamos’”.
“El valor te lo tienes que dar tú”, dijo. “Nunca me consideré cantante jamás, de pronto la vida me pone en el destino la oportunidad de ser parte de un proyecto increíble que yo no tenía ni idea de cómo vivir, fue lo primero que hice, yo venía del CEA. Nunca en mi vida había actuado ni cantado, nunca en mi vida había estado frente a 30 mil personas en un escenario”.
“Yo volteaba alrededor y yo veía a cinco personas que ya tenían una solidez y una carrera y estaban preparados para lograrlo. Una persona me dijo, ‘¿eres actriz? Bueno actúa que eres cantante, súbete a ese escenario y actúa que cantas’”, recordó. “Tomé más clases de canto, me preparé a moverme de lugar y empecé a disfrutarlo más, a jugar a divertirme y a liberarme en el escenario, pero cuando lo hice, ya fue muy tarde porque se acabó el grupo, ¡pero me la pasé increíble!”, dijo entre risas.
Un giro en su vida profesional que la fortaleció
Tras el éxito de RBD, vinieron otros grandes proyectos a nivel actoral, como las telenovelas Mi Pecado, Triunfo del Amor y Cachito de cielo. A pesar de estar en un gran momento como el nuevo rostro de las telenovelas, en 2013 se atrevió a dar un giro a su carrera y lanzó su primer disco solista Eclipse de luna.
“En algún momento tomé la decisión de cambiar el rumbo de mi carrera y en ese momento recibí muchos comentarios muy distintos. Estaba en un momento en el que la balanza estaba de mi lado, pero yo estaba pensando, ¿qué es lo que quiero para mi futuro profesional?”, añadió. Aunque había dudas, para Maite esta experiencia su bastante enriquecedora. “Si no lo intentas, si no lo haces, no va a suceder el cambio. En ese sentido, sí ha sido una de mis fortalezas ha sido hacerle frente a las circunstancias que se presenten, aunque en el momento no sepa ni cómo”.
En este despertar emocional, la cantante aseguró que con el paso del tiempo ha ido aprendiendo de los más duros golpes. “Han habido distintas situaciones... La vida misma me fue permitiendo aprender a partir del dolor”, agregó en esta sincera charla.