En medio de su éxito de Bad Bunny ha sido alcanzado por la polémica en algunas ocasiones, como cuando lanzó al agua el celular de una fanática. Pero ahora el cantante boricua se ha visto envuelto en líos legales luego de que una exnovia interpusiera una demanda por temas de derechos de autor, por la que está exigiendo una cifra millonaria como compensación.
Bad Bunny, cuyo nombre real es Benito Antonio Martínez Ocasio, ha sido demandado ante un tribunal de San Juan, Puerto Rico, por su expareja Carliz de la Cruz, quien exige al menos 40 millones de dólares por derechos de imagen, derechos morales de autor y daños y perjuicios. La boricua, quien hace un par de años se licenció cómo abogada, emprendió está medida legal debido a que el cantante ha usado el estribillo “Bad Bunny baby” en varios temas sin su autorización.
De acuerdo con el documento legal, presentado el pasado 1 de marzo en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan, pero dado a conocer este lunes por medios locales como NotiCel, años atrás, en 2015 cuando Bad Bunny y Carliz eran novios “decidieron que sería una idea cautivadora” que el cantante incluyera después de su nombre artístico, incluyera la palabra ‘baby‘. “Con la intención de que la frase ‘Bad Bunny baby’ fuese más original todavía, ambos tuvieron la idea que lo mejor es que se grabara con la voz de Carliz, su novia”, se explica en la demanda. Ella accedió e hizo la grabación con su teléfono celular mientras se encontraba con una amiga.
El intérprete incluyó ese estribillo por primera vez en su tema Pa’ ti, lanzado en 2017, y según acusa el documento legal interpuesto por De La Cruz, se hizo “sin su consentimiento, ni autorización por escrito”. Esta canción fue la primera que Bad Bunny grabó para la disquera Rimas Entertainment, con la que el boricua firmó contrato en 2016 y que también ha sido demandado por Carliz. También se utilizó en la canción Dos mil 16, lanzada el año pasado como parte de su exitoso álbum Un verano sin ti.
La demanda establece que la “voz distinguible” de Carliz se ha usado sin su consentimiento para canciones, discos, promociones, conciertos en todo el mundo, televisión, radio y plataformas sociales y musicales.
“Miles de personas comentan directamente en las redes sociales de Carliz, así como cada vez que acude a cualquier lugar público, acerca del ‘Bad Bunny Baby’. Lo anterior, ha provocado, y actualmente causa, que De La Cruz se sienta preocupada, angustiada, intimidada, agobiada y ansiosa”, señala la querella.
La historia de Bad Bunny y Carliz
Carliz y Benito iniciaron su noviazgo en 2011, mientras estudiaban y trabajaban en una tienda de comestibles. De acuerdo con la demanda, el entonces cantante en ciernes creaba canciones y ritmos y le consultaba su opinión a su novia, quien incluso se encargaba de programar las fiestas en las que él se presentaba, así como manejar sus cuentas y contratos.
En enero de 2016, Bad Bunny le pidió matrimonio a Carliz, ella aceptó y planearon celebrar su boda el julio de ese mismo año. Sin embargo, sus proyectos profesionales se interpusieron en su enlace, pues en abril el cantante firmó con Rimas Entertainment mientras que ella fue aceptada en la Universidad de Puerto Rico para estudiar derecho. Terminaron su relación en mayo de ese mismo año, y aunque se fueron otra oportunidad en 2017 se volvieron a separar.