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Desde hace casi un mes, Pablo Lyle se encuentra recluido en el South Florida Reception Center, la prisión estatal a la que fue canalizado tras recibir su sentencia. Mientras se resuelve la apelación de su defensa, el actor permanecerá en este centro donde ha tenido que acatar las reglas como el resto de los internos. Esta tarde, Ventaneando presentó en exclusiva el Manual de Orientación de este lugar, un documento al que tuvo acceso y en el que se explica cómo es la estancia del mexicano en esta cárcel en la que duerme desde su último encuentro con la juez. En esta guía se detallan las reglas generales de comportamiento, procedimientos y rutinas de la prisión.
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Uno de los puntos más importantes es que Pablo debe portar la identificación con fotografía que le fue entregada a su ingreso, una tarjeta que le da acceso a otros derechos en la cárcel: “Usted nunca debe estar fuera de su área de alojamiento sin su identificación en su posesión y debe estar visible en todo momento. La credencial de identificación es requerida para que usted reciba su correspondencia, coma en el comedor y tenga acceso a su cuenta bancaria de preso electrónicamente o para ser aceptado a una entrevista durante el proceso de admisión”. Los detenidos tienen asignadas áreas donde pueden estar, de lo contrario, serán acreedores a una sanción: “Su presencia en ese lugar (área restringida) podrá ser interpretada como un intento de fuga, y se tomarán las medidas apropiadas”, se lee en otra parte del texto.
© Getty ImagesEn este apartado en el que se específica dónde pueden transitar los detenidos: “En caso de que un helicóptero intente aterrizar en la institución o en sus cercanías, usted deberá alejarse de la aeronave. Moverse hacia el helicóptero será considerado un intento de fuga”, se detalla en otra parte. Cuando Pablo ingresó le dieron un espacio de alojamiento: “Durante su primer día en el centro de admisión, se le asignará una cama en un área específica. Usted será responsable de la limpieza de su área personal. Esto incluye su cama, caja de pertenencias personales, y el piso alrededor de la cama. Usted es responsable de asegurar que el espacio de su alojamiento esté libre de contrabando. Esto incluye el área de su cama, colchón, caja de pertenencias o la pared. En caso de encontrar contrabando, deberá notificar a un empleado de corrección inmediatamente”.
Sobre el código de vestimenta, Pablo tiene la obligación de portar el uniforme: “Siempre que esté fuera de su área de alojamiento, usted deberá llevar puesto su uniforme, que es la camisa azul, pantalón azul, ropa interior, medias y zapatos entregados por el estado. Las camisas deben estar dentro del pantalón y todos los botones abotonados, a excepción del botón superior del cuello”. Sobre la comunicación hacia el exterior, se sabe que Pablo sí tiene comunicación telefónica con su familia: “Podrá llamar sólo a las personas en la lista aprobada. Periódicamente, podrá agregar o eliminar números de estas listas. Los empleados del Departamento podrán aprobar o negar un número en su lista. Todas las llamadas telefónicas podrán ser grabadas y/o monitoreadas electrónicamente”.
© Getty ImagesLas advertencias de los detenidos
En la parte final del manual se especifica que las visitas son un privilegio, no un derecho. A lo que sí tienen acceso de manera regular: “Atención médica regular, uso de la biblioteca y capacitación vocacional, tres comidas diarias, enviar y recibir correspondencia que será inspeccionada para evitar contrabando”. Una de las advertencias más importantes es que los detenidos tienen prohibido relacionarse con los grupos peligrosos que existen dentro de la prisión: “Involucrarse con un grupo de amenaza de seguridad (Pandilla) resultará en su identificación como miembro de ese grupo y puede afectar su elegibilidad para asignaciones de trabajo, ciertos tipos de transferencias y puede resultar en acción disciplinaria”, se lee en otra parte. Durante el tiempo que Pablo se encuentre en prisión deberá cumplir con una labor asignada: “No tiene la opción de rechazar una asignación de trabajo. Los detenidos son asignados a los trabajos, basado en las necesidades institucionales, sus antecedentes laborales y su nivel de habilidad”.
