Con su talento, Lucerito Mijares se ha hecho un lugar propio en el mundo del espectáculo, aún sin haber hecho su debut oficial como cantante. A sus 18 años, la joven es bastante madura y tiene algunos planes definidos para el futuro, aunque por ahora sigue sorteando si seguirá o no los pasos de sus padres, Lucero y Mijares, en la música. Lo que sí tiene seguro es que en este medio las críticas van y vienen, pero los comentarios no le molestan y reveló si busca hacer cambios en su físico o personalidad para ser más parecida a su famosa mamá.
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“Me siento muy a gusto con mi forma de ser, mi cuerpo, mi todo”, dijo bastante respetuosa ante algunos periodistas mexicanos. Con un poco de humor, agregó: “¡Claro! Un poquito de ejercicio no nos haría mal a nadie, pero la verdad estoy muy cómoda”.
Sobre los comentarios negativos que la gente suele hacer detrás de una pantalla, continuó: “Me dan exactamente igual porque sé que hay algunos que no son verdad, algunos que sí pero me dan lo mismo porque yo sé cómo soy y la gente ajena no me conoce al 100%”.
En cuanto a su carrera como cantante, no descarta la música ranchera, uno de los géneros que no sólo conoció muy bien por sus raíces mexicanas, sino por la carrera de su mamá. “Me encantan. No he experimentado con ellas ni con mi profesor de canto, pero me da un poquito de miedo, pero a ver si ya pronto les doy la sorpresa”.
El divorcio de sus padres, un capítulo que no la afectó
Con el paso del tiempo, Lucero y Manuel Mijares se convirtieron en grandes amigos luego de su divorcio en 2011. La expareja quedó en buenos términos no sólo por el bien de sus hijos, sino por el cariño que los une desde hace varias décadas.
“Mis papás se llevan muy bien, como lo podemos ver, y agradezco mucho eso”, expresó. Y recordó: “Yo era bien chiquita, creo que se separaron cuando tenía seis o siete años. Lo han hecho muy bien porque a mi hermano y a mí nos han cuidado mucho y nunca vimos ninguna discusión o pelea, que puede ser que sí las tuvieron como cualquier pareja”.
Con sus hogares bastante cercanos, es común que Lucero y Mijares sigan en contacto a pesar de que cada uno tomó rumbos distintos en cuestiones de amor. “Hay veces que de la nada llego a la casa de mi papá y está mi mamá ahí platicando con él. La verdad es muy padre porque se quieren mucho”, concluyó.