Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa: así fue su historia de amor que duró casi ocho años

Mario Vargas Llosa y Patricia Llosa tenía 50 años de casados, y el 29 de mayo de 2015, celebraron con sus tres hijos sus bodas de plata en Le Bilboquet, un elegante restaurante del Upper East Side, en Nueva York.

Todo parecía ir bien, incluso días después, el 2 de junio festejaron el Doctorado Honoris Causa que le concedió la Universidad de Princeton. Pero la familia entera, sobre todo Patricia, se llevarían una gran sorpresa luego de que Mario le revelara a Patricia sus intenciones de separarse.

El 10 de junio ¡HOLA! España reveló unas imágenes del escritor almorzando y compartiendo con Isabel Preysler, una de las socialités más importantes de España.

Meses después del surgimiento de las imágenes y de que Vargas Llosa e Isabel hicieran oficial su relación, en 2016 los Llosa empezaron los trámites de su divorcio.

En cuanto a Isabel Preysler, se sabe que al momento de reencontrarse con Vargas Llosa en Londres, ella era viuda de su marido, Miguel Boyer. Boyer murió en septiembre de 2014, y el encuentro con Vargas Llosa se dio en mayo de 2015.

Isabel y Miguel estuvieron casados por casi 30 años hasta la muerte de este, quien lidió por dos años con las secuelas de un derrame cerebral. La pareja tuvo a Ana Boyer, pero de otras relaciones, Isabel tenía otros cuatro hijos; ‘Chábeli’, Julio Jr. y Enrique Iglesias de su primer matrimonio con Julio Iglesias y en segundas nupcias con Carlos Falcó y Fernández de Córdoba, V marqués de Griñón, procreó a Tamara Falcó.

La pareja se reencontró casi 30 años después de haberse conocido, cuando Isabel lo entrevistó para ¡HOLA! en 1986. Coincidieron en un viaje organizado por Porcelanosa, en el que visitaron al entonces príncipe Carlos de Inlgaterra.

Desde entonces se hicieron inseparables; él conociendo más sobre el jet set español y ella, adentrándose al mundo literario y a las actividades de él.

En su primera entrevista como pareja, en 2016, Mario Vargas Llosa reveló a ¡HOLA! España que la noticia de su romance con Isabel Preysler fue algo duro para los suyos.

“Para la familia no ha sido fácil. La situación nos tomó por sorpresa. No esperaban que surgiera algo como esto a estas alturas de mi vida. Así que ha habido que limar las cosas”, dijo el escritor en ese entonces.

“Esto que nos sucedió a nosotros fue inesperado. No era algo que nos imagináramos que fuera a ocurrir, pero ocurrió. Estamos en una etapa muy bonita, muy feliz, dando los pasos que se van dando cuando se han de dar”, dijo en esa misma entrevista el escritor. “Este ha sido el año más feliz de mi vida”, agregó en dicha conversación con ¡HOLA!.

La relación fluyó tan bien, que el Nobel se mudó a la casa de Isabel en Puerta de Hierro, un exclusivo barrio ubicado al noroeste de Madrid. Vargas Llosa se llevaba bien con los hijos de Isabel.

En esta foto, aparece con Tamara Falcó, la hija de Isabel con Carlos Falcó. Incluso, el autor aparece en unas escenas de la docuserie de Tamara, cuando ella le pide consejo para el lanzamiento de su próximo libro.

En noviembre de 2018, tras un largo proceso de divorcio, el autor quedó divorciado de Patricia Llosa, tras 50 años de matrimonio.

Todos esperaban la fastuosa boda entre la llamada ‘Reina de corazones’ y el escritor, pero eso no sucedió, a pesar de que él ya le había pedido que se casaran.

“Estamos maravillosamente bien como estamos”, dijo Isabel en una declaraciones recogidas por ¡HOLA!. “Somos muy felices así y por el momento, y a estas alturas de la vida no vemos la necesidad de cambiar nuestra situación. Mario me da pedido que me case con él, pero aún no le he respondido. Nada está descartado en nuestro futuro. Todas las opciones son posibles”.

En una entrevista este año con Jorge Ramos para su programa Algo Personal (ViX+), el periodista le preguntó si enamorarse en los ochentas era igual que a los veintes, en referencia a su edad, a lo que Mario contestó que sí.

“Yo creo que sí. Yo creo que el amor es una de las cosas maravillosas que existen en la vida y poder realizar el amor es una cosa absolutamente maravillosa”, indicó. “Yo creo que ya no me va a volver a ocurrir (risas). Yo creo que ya me he pasado de la edad en la que eso es posible, pero de la última vez que me enamoré con Isabel, he vivido momentos absolutamente maravillosos”, confesó.

En un encuentro reciente ante los medios, a inicios de este mes, Isabel volvió a asegurar que no necesitaban casarse, pues así estaban bien.

“A estas alturas no hace ninguna falta, absolutamente ninguna”, dijo al respecto a medios como Vanitatis. Aunque reconoció que Mario sí le había pedido matrimonio, aseguró que así, solo de novios estaban mejor. “Mis hijos le han aceptado perfectamente y sus hijos han aceptado bien la situación”, dijo hace tan solo unas semanas.

Ahora, ambos enfrentan una dolorosa separación en vísperas de Año Nuevo, esperando que el 2023 traiga consuelo y nuevos horizontes para curar sus heridas.