Hace unos días, la cantante española Natalia Jiménez había compartido en sus redes que se encontraba en una batalla legal con el padre de su hija, Daniel Trueba, con la finalidad que su exeposo le permitiera viajar con la niña a México. Finalmente, un juez en Miami le dio la autorización pertinente para que la intérprete de Creo en mí trasladara a la menor a suelo azteca.
La audiencia se llevó a cabo el fin de semana pasado y Natalia expresó su sentir al respecto por medio de un conmovedor mensaje a sus seguidores. “Gracias por vuestras oraciones. ¡Funcionaron! Soy un mar de lágrimas de emoción. Los quiero”, comentó.
El argumento de su expareja era que dicho país no es seguro para su niña, Alessandra, ya que México siempre ha sido un lugar en el que la española realiza la mayor parte de sus presentaciones y en dónde pasa largos períodos de tiempo.
“Estoy feliz de que mi hija va a poder venir conmigo a México; vamos a estar de vacaciones, en diciembre, y al fin va a venir a México conmigo, ¡sí!, ¡sí! ¡Estoy feliz, estoy muy contenta!”, mencionó Jiménez emocionada hasta el llanto. “Gracias a todos. Yo sé que pusieron sus mejores intenciones sobre mis mensajes, que me mandaron oraciones”.
Agradecida a la Virgen de Guadalupe
Este 12 de diciembre se celebró el día de la Virgen de Guadalupe, y como buena creyente, Natalia recalcó su agradecimiento a la patrona de México, una fe que, según sostiene, la ha ayudado en este difícil proceso
“Un fan llegando a El Paso me regaló un rosario divino (de la Virgen de Guadalupe) que me había traído de La Villa, y quiero que sepan que, durante la audiencia, yo tenía envuelto el rosario en la mano, así de: ‘Esto me tiene que salir bien’ y salió”, relató emocionada la cantante.