Un par de semanas después de su inesperada salida del programa Al Rojo Vivo y de la cadena Telemundo , Rodner Figueroa ha hecho un triste anuncio. Pero éste no tiene nada que ver con sus proyectos profesionales, sino más bien con si vida fuera de los sets de grabación. Desconsolado, el conductor venezolano ha revelado el duro diagnóstico médico que recientemente le informaron de Napoleón, uno de sus perritos.
Rodner hizo una trasmisión en vivo en su cuenta de Facebook para desahogarse con sus seguidores e informarles los detalles de la salud de su amada mascota, la cual desde hace unos días lo tenía preocupado. “Nosotros pensamos que él tenía un problema en la columna porque ya le había pasado previamente y su veterinario nos dijo que ‘seguramente eso es lo que tiene’ que se le repitió”.
Sin embargo, el también diseñador de moda reveló que optó por llevar a Napoleón al neurólogo, donde le hicieron algunos exámenes, los cuales, desafortunadamente, arrojaron un resultado desalentador. “Le encontraron un tumor en la parte frontal del cerebro”, reveló entre lágrimas.
“Yo tenía la esperanza de que de que fuera algo de los discos cómo nos habían dicho, pero no, tiene tumor en el cerebro que le está apretando el cerebro en la parte frontal y le está comprometiendo la capacidad motriz”, explicó.
“Me estoy desahogando porque no quiero él sienta que yo estoy angustiado, que estoy triste, porque yo siempre lo que uno siente. Solo el que tiene mascota entiende lo que estoy sintiendo”, comentó.
Enfrenta una decisión dolorosa
Rodner agradeció de corazón la preocupación y los mensajes de apoyo de sus seguidores. “Por favor recen por nosotros, por Ernesto (Mathies), por mí”, expresó más adelante, refiriéndose a su pareja, quien también está sintiendo profundamente el diagnóstico de su perrito. “Y gracias por escucharme, pero es que necesitaba sacarme esto de adentro, no lo quiero hacer delante de Napoleón”, reiteró.
“Pero bueno tengo que ser fuerte y tengo que tomar la decisión que sea mejor para él y no para mí”, dijo. Rodner contó que cuando a su —ya fallecida— perrita Carlota le diagnosticaron un linfoma, los veterinarios fueron sinceros al decirle que incluso con quimioterapia, las probabilidades de recuperación eran pocas, pero él quiso serguir adelante con el tratamiento.
“Uno en la deseperación de extenderle la vida al animal trata de hacer muchas cosas. En mi opinión no valió la pena hacerla sufrir más, fue extenderle una agonía”, contó. Rodner reveló que en aquel momento pensó, que si Napoleón estuviera en un escenario similar no lo sometería al mismo sufrimiento. “No le puedo extender la vida para que sufra... Y veo que en estas dos semanas ha estado empeorando y empeorando... Así que sólo quiero pedir que recen por él para que esté en paz, para que esté tranquilo”.