En la ficción, la vida de Matthew Perry como Chandler Bing es todo risas, pero en la vida real el actor de Friends libró una dura batalla contra el alcoholismo y el abuso de sustancias. En su próxima autobiografía, Friends, lovers and the big terrible thing, disponible a partir del 1° de noviembre, Perry hablará como nunca de esa situación que casi termina con su vida. “Quería compartir esto cuándo estuviera a salvo de volver a entrar en el lado oscuro de todo”, dijo en exclusiva a PEOPLE . “Tuve que esperar hasta estar bastante sobrio, y lejos de la enfermedad del alcoholismo y la adicción, para escribirlo todo. Y lo principal era que estaba bastante seguro de que ayudaría a la gente”.
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En su conmovedor relato, Perry revelará los detalles de la situación que lo llevó a estar al borde de la muerte hace un tiempo, cuando tenía 49 años. En ese momento, Perry dio a conocer que sufría de una perforación gastrointestinal, pero pocos sabían lo que había detrás de esto. El actor pasó semanas luchando por su vida después de que su colon estallara por el uso excesivo de opioides. Pasó dos semanas en coma y cinco meses en el hospital y tuvo que usar una bolsa de colostomía durante nueve meses.
Cuando fue admitido por primera vez en el hospital, no había esperanza. “Los doctores le dijeron a mi familia que tenía el 2% de probabilidades de sobrevivir”, recordó. “Me pusieron en una cosa llamada máquina ECMO, la cual hace toda la función de respirar por tu corazón y tus pulmones”, indicó, refiriéndose a que era como la antesala de la muerte. “Y eso se llama un Ave María. Nadie sobrevive a eso”.
A los 24 años, fue elegido para formar parte del elenco de Friends, y al mismo tiempo, su adicción empezaba a repuntar. “Lo podía manejar, más o menos. Pero cuando ya tenía 34 años, ya estaba realmente metido en in problema”, admitió. “Pero hubo años en los que me mantuve sobrio por un tiempo. En la temporada nueve fue el año entero en el que me mantuve sobrio. Y ¿adivina en qué temporada fui nominado como mejor actor? Yo estaba como, ‘esto debería de significar algo’”.
Sus ‘Friends’ no le fallaron
En uno de los momentos más oscuros de su etapa en Friends, Perry recuerda tomar 55 píldoras de Vicodin al día y su peso estaba por debajo de las 128 libras. “No sabía cómo detenerme”, dijo. “Si la policía venía por mi a mi casa y me decías, ‘si bebes alcohol esta noche, te llevaremos a la cárcel’. Yo en ese momento, empezaría a empacar. No podía parar porque la enfermedad y la adicción son progresivos. Así que se pone cada vez peor”.
Aunque intentó esconder su condición, los cambios en su apariencia y su conducta eran cada vez más notorios. Sus compañeros en la serie “eran comprensivos” y fueron “pacientes” con él. “Es como los pingüinos. Los pingüinos en la naturaleza, cuando uno está herido o muy enfermo, los otros pingüinos lo rodean y lo apoyan. Ellos caminan alrededor del que está enfermo hasta que este puede andar por sí solo. Eso fue algo similar a lo que el elenco hizo conmigo”, explicó.