Max y Emme, los hijos de JLo con Marc Anthony, ya no son unos niños. Con 14 años, los chicos empiezan a descubrir el mundo a su manera y a cambiar todo en casa con nuevas ideas, estilos y conductas; cambios que la orgullosa mamá ha notado en los últimos meses y, aunque de pronto siente algo de temor al verlos crecer tan rápido, también se siente feliz de compartir con el mundo entero estas grandes personas que tiene en casa.
Así lo compartió en su reciente visita a Live! With Kelly and Ryan, en donde habló muy feliz sobre sus hijos, lo grandes que están y qué es lo que las nuevas generaciones tienen en mente y a lo que ponen atención. “Ahora son adultos”, dijo contenta con su crecimiento, y agregó: “Son como pequeños adultos y tienen sus propias vidas y ya tienen todas sus propias ideas sobre el mundo”.
JLo se enfrenta a esa etapa en la que sus hijos piensan que ya conocen todo de la vida, aunque aún les falta mucho por aprender y experimentar. “Aman demostrar que saben algunas cosas”, dijo la feliz mamá con un tono un tanto sarcástico, dando pie a pensar que a veces no están en lo correcto, pero para eso está mamá y sus habilidades de mostrarles el camino correcto sin que ellos se den cuenta.
A pesar de ello, la también actriz confesó que en algunas ocasiones deja que sus pequeños se salgan con la suya, algo que alimenta su confianza. “Siento que aprendo mucho de ellos y me mantienen al tanto del mundo y de lo que está sucediendo ahora y de cómo piensan los niños”, confesó emocionada la cantante sobre cómo puede acercarse a las nuevas generaciones.
Ya no son los bebés del hogar
Con la adolescencia a flote y las ganas de comerse el mundo, Max y Emme dejaron atrás algunos de sus gustos para cambiarlos por nuevos intereses mucho más maduros. “Es algo completamente diferente, es una mentalidad completamente diferente, un mundo diferente”, compartió JLo.
“Han pasado de ser bebés a ser conscientes de lo que sucede. Están pasando muchas cosas con ellos”, expresó Jennifer en su papel materno. Y basta con ver a los chicos, su forma de expresarse y de vestir para entender que se encuentran en esa etapa de encontrar su propia voz y expresarla al mundo.