Dicen que una de las formas más reales de demostrar amor se mide por lo mucho que quieres a la familia, ya que esa manifestación de cariño en nuestro círculo íntimo nunca cambia. Ejemplo claro de ello son la dinastía Aguilar, la cual es dentro del mundo de la música una de las más sólidas y exitosas que existen en la actualidad. En ese sentido, Pepe Aguilar, patriarca del clan, ha sabido mantener el legado que empezaron sus padres, don Antonio Aguilar y doña Flor Silvestre, para llegar por extensión a una tercera generación de artistas que ha encontrado en sus dos hijos menores, Ángela y Leonardo, la continuidad musical que los mantiene vigentes en la industria y con quienes ha posado en exclusiva para nuestra portada digital por el Día del Padre.
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Dentro del marco de esta fecha tan especial, celebramos la gran labor paternal del gran representante del Regional Mexicano quien junto a su esposa, Aneliz Álvarez, ha sabido forjar una maravillosa familia basada en valores y principios inculcados de buena manera en los suyos por 25 años.
relacionado:
Una parte palpable de ese amor que los une como compositores lo podemos ver actualmente en su “Jaripeo sin Fronteras”, una gira promovida por el ganador de cuatro premios Grammy y cinco Latin Grammy, junto a sus hijos y su hermano, Antonio Aguilar, la cual recorre gran parte del suelo americano con mucho éxito.
En esta amena charla con HOLA! USA, el ícono mexicano nos muestra su lado más humano en un intercambio de anécdotas, recuerdos y confesiones junto a sus dos retoños, que van desde su experiencia como cantante, papá, hijo y esposo hasta su proyecto audiovisual de realizar un reality show familiar el cual verá la luz muy pronto.
“Yo soy su padre, no soy su dueño, entonces les puedo enseñar lo que sé pero ellos también tendrán que aprender lo que deben de aprender, no nada más porque yo se los estoy diciendo” – Pepe Aguilar –
Foto: Clemente Ruiz
¿Cuál es el secreto para mantener y cuidar una familia como la de ustedes?
Pepe Aguilar: “No hay secreto, creo que mucho amor de mi esposa y de mí a nuestros hijos, a nuestra familia y eso también se ve traducido al espectáculo. Pero bueno, el espectáculo está basado en otra cosa, no nada más en la familia… la familia se adaptó al espectáculo y es muy bonito que podamos mostrar nuestras raíces en familia con un espectáculo grande que dignifica también otras cosas a parte de la familia, entonces se juntan muchos conceptos en ‘Jaripeo sin Fronteras’ y sí, es una bendición para mí que mis hijos puedan estar dentro del show”.
Ángela, ¿qué significa para ti poder contar con tu padre a todo nivel?
“Para mí él es el mejor ejemplo, el mejor maestro, el mejor aliado en casa. Es el mejor papá del mundo. Está muy bonito poder tener en casa algo qué es muy difícil tener que es alguien que entiende por lo que estás pasando, ha vivido lo que tú estás por vivir, que te puede enseñar no solo de la vida sino de tu profesión y que podamos tener esa conexión creo que muy pocas personas la pueden tener… que tu misma pasión es la misma pasión de tu papá, es una bendición, la verdad”.
Leonardo, y para ti, ¿qué significa contar con el apoyo y cariño de tu papá?
“Pues, él es nuestro jefe, nuestro maestro y es una bendición poder tener ese feedback constante de cómo va a ser la vida, de cómo va la carrera, lo personal, de manera seguida y constante. Es una bendición”.
Foto: Clemente Ruiz
Pepe, ¿cuál ese tema o consejo que siempre le recalcas a tus hijos para que les vaya bien la vida?
“No, creo que no hay uno solo. Son un cúmulo de valores y principios… la honestidad es muy importante y creo que aplica a todo. Siendo honesto contigo mismo te das cuenta de tus limitaciones; por lo tanto, te puedes llegar a aceptar y querer rápidamente, no tener que mentir o andar haciendo cosas que te perjudiquen. Hay muchas otras, pero también me doy cuenta que esto es un camino que hay que caminarlo de diferentes maneras.
Yo soy su padre, no soy su dueño, entonces les puedo enseñar lo que sé pero ellos también tendrán que aprender lo que deben de aprender, no nada más porque yo se los estoy diciendo. Mi esposa y yo hacemos todo con un balance y lo hacemos con amor. Si no tienes amor, todo es un drama o todo es un motivo de ruptura, porque vas manejándote solo con ego, nada más. Ojo, a veces son duras las situaciones en la familia y ninguna familia se salva y entre más crecen más duras son las situaciones”.
¿En qué momento crees que les has fallado como padre o que tal vez no has estado a la altura de alguna situación?
“Todos los días. Nadie viene educado de fábrica para ser papá… al fin de cuentas, la vida es un caos y a los hijos los educan los amigos, los maestros, la televisión, el Internet, los videojuegos, en fin… tantas cosas; sus hermanos, sus traumas. Aquí de lo que se trata es mejorarse a sí mismo. Cada quien, en dónde esté, en el lugar que esté en la vida, trata de mejorarte como persona: quítate traumas, situaciones que tú mismo le puedes pasar a tus hijos. La mejor manera de ser un buen padre es ser una buena persona”.
Foto: Clemente Ruiz
Ángela, ¿puedes compartir alguna una anécdota entrañable que atesores con tu padre?
“Mmm… la verdad que todos mis recuerdos son junto a mi familia y los que más amo son junto a ellos; entonces, no sé… puede ser cuando me llevaba al kínder en su moto o cuando lo acompañaba cuando hacía las entrevistas en las cabinas de radio y me tenían que poner cojines en las sillas para poder ver qué estaban haciendo.
Una vez, mi mamá y mi hermana se fueron a París juntas para el cumpleaños número 15 de mi hermana y yo me quedé con mis hermanos y mi papá me quería cortar el pelo en la casa, casi me traumo. Cuando empecé otra vez a montar y mi papá me dice: ‘Ponte a galopar, ándale’ y yo no había montado en años. Muchas veces lo he acompañado a que lo tatuaran o le terminaran un tatuaje y lo acariciaba y pensaba que mi presencia iba a ser que no le duela (risas)”.
Leo, ¿alguna anécdota que quieras compartir?
“Una vez estábamos pescando en su yate allá en el rancho de Zacatecas y pescamos bobinas e hicimos una comida, ahí tengo las fotos, yo tenía como 10 años creo. Fue la primera vez que pesqué. Él es malísimo (risas) y ahí empezó todo. Son muchos recuerdos que tengo con mi padre… antes de los shows o de vacaciones”.
Foto: Clemente Ruiz
“Por ahí andábamos pensando en hacer un Reality sobre nuestra vida en el camino y usando ‘Jaripeo sin Fronteras’ como base” – Pepe Aguilar –
Pepe, ¿te gustaría ver tu vida reflejada en una docuserie, te han hecho alguna propuesta?
“Por ahí andábamos pensando en hacer un reality sobre nuestra vida en el camino y usando ‘Jaripeo sin Fronteras’ como base. Es muy probable, hay un 90% de probabilidades que se haga, lo vamos a producir nosotros mismos con un socio que recién hicimos un acuerdo, tenemos un contrato ahora con Simon Fuller que es un productor internacional muy importante para crear contenido y probablemente este Reality sea el primero que saquemos. También habrá una docuserie, porque hay mucha historia… a parte de mi historia y la de mis hijos, obviamente con mi madre y con mi padre”.
¿Cómo le darían forma a tanta historia familiar?
Pepe: “Pues, empezaría primero con la historia de mis papás, luego con nosotros, con mi hermano y conmigo, y después con mis hijos. Entonces abarcaría tres generaciones de espectáculo. Una docuserie, que sería más adelante y que ya tenemos bastante de esto escrito”.
¿Ya tienen fecha para el estreno?
“Pues, estamos en eso y creo que pronto verán algo al respecto”.
Foto: Clemente Ruiz
¿Tienes en mente quién podría interpretar tu papel en el caso que se dé una serie biográfica de tu vida?
“No, no tengo la menor idea. No veo ni telenovelas, ni televisión desde hace mucho. No tengo tiempo. Ya veremos en su momento quién podría representarme y a cada uno de nosotros. Somos muchos personajes, no solo somos nosotros tres y a lo largo del tiempo. Por ejemplo, quién va a ser a Ángela cuando estaba chiquitita, porque ella empezó a los tres años, quién va a hacer a Leonardo cuando tenía seis y cantaba en las fiestas.
Quién va a hacer a mi papá cuando tenía 13 años y salió del rancho sin ningún peso, con una mano adelante y otra atrás a tratar de mandar dinero a su casa. Quién va a hecer a mi madre cuando estaba en Argentina, desolada, sola, con su hija chiquita y se escapó a México, en fin… hay muchos momentos en la historia que van a requerir de mucha representación”.
Ángela, ¿quién crees que podría llenar los zapatos de tu padre y encarnarlo en el personaje de su serie?
Ángela: “Yo no sé, pero puedo decir una cosa… todos los actores que conozco son súper chaparros, entonces como que no me haría sentido ver a mi papá chaparro, porque parte de lo que lo hace ser él es que mide casi dos metros (6’7 pies). Entonces, tendríamos que sacar a un jugador de básquet que sepa actuar y luego ya… (risas)”.
Leonardo: “¡LeBron James! (risas)”
Ángela: “No creo que nos alcance el presupuesto para LeBron James (risas)”.
Pepe: “No, pues ya veríamos quién… se puede hasta digitalizar ahora y con la inteligencia artificial se puede manipular la idea de algún actor que se me parezca. Ellos [sus hijos] piensan que yo nací así de grande (risas)”.
Foto: Clemente Ruiz
“Estoy ahorita en una etapa en que me he dado cuenta que no hay manera de protegerlos las 24 horas del día, en determinado momento el proteger hace más daño que no, en ciertos aspectos, porque la gente tiene que experimentar”.
En ese sentido… ¿qué mito sobre su padre que tenían de chiquitos se ha ido diluyendo con el tiempo?
Ángela: “Yo tengo uno perfecto… Yo creí hasta los 12 o 13 años que si a mi papá le damos un beso en el ojo se le cerraba y mi papá duraba muchísimo tiempo con el ojo cerrado y si le dabas otro beso, ya se le abría el ojo. Pensaba que era como un poder mágico que yo tenía con mi papá y hacía que le cerrara el ojo y mi mamá hacía lo mismo… y me traumaron cuando me di cuenta que no era verdad (risas)”.
Leonardo: “Mi papá hacía una cosa en la mesa en Ciudad de México, cuando vivíamos en México, se sentaba así como derechito y decía: ‘Voy a levantar la mesa, ¿ok? Con mi mente’, y de pronto la mesa se levantaba y hacía con sus manos unos ademanes de que flotaba… obvio lo hacía con sus piernas porque son muy largas (risas). Nunca entendíamos cómo lo hacía porque cuando checábamos debajo de la mesa ya lo había hecho, era muy divertido”.
Pepe, ¿qué es lo que siempre te va a preocupar de tus hijos, aún así pasen los años?
“No… pues, su bienestar. Estoy ahorita en una etapa en que me he dado cuenta que no hay manera de protegerlos las 24 horas del día, en determinado momento el proteger hace más daño que no, en ciertos aspectos, porque la gente tiene que experimentar. Trato de preocuparme menos porque cada vez soy un hombre de más fe y si realmente crees que hay un poder divino, grande, cada vez que te preocupas estás dudando de su existencia.
Cada vez lo entiendo más y pongo mi fe en Dios para que los proteja y se sepan cuidar y que el trabajo que hicimos su madre y yo como papás hayas sido lo suficientemente fuerte para que se cuiden y les toque suerte, porque mucho de la vida es suerte. Que les duela menos la vida, porque de que les va a doler, les va a doler”.
Foto: Clemente Ruiz
En octubre vas a cumplir 25 años de casado junto a tu esposa, Aneliz… ¿qué significa eso para ti?
“Es un gran logro… la verdad que es una gran sorpresa que la vida se haya pasado muy rápido y la sorpresa es que me haya aguantado mi esposa tanto. Me siento muy afortunado de haber creado un hogar… me siento con muchas cosas por hacer todavía con mi esposa… no sé dónde se quedaron esos 25 años pero han sido llenos de amor, de alegría, lindos recuerdos, crecimiento, lágrimas, de aprendizaje.
Ahora, mi esposa y yo somos unos olvidadizos… ¡de lo peor! Cuando cumplimos 20 años, ¡se nos pasó a los dos! Andaba en un show, no sé por dónde, en la tarde me acordé: ‘No manches, cumplimos hoy 20 años de casados…’, pero me acordé que a ella también se le olvidó”.
¿Qué significa la familia para ustedes?
Leo: “La familia significa todo, significa tradiciones, trabajo, compañía, crecimiento, mucho amor y mucho calor de poder vivir esta vida acompañado”.
Ángela: “Para mí, mi familia y la gente con la que he tenido la fortuna de haber crecido es una bendición. Mi familia es mi vida y no la cambiaría por nada. Sé que es el mejor lugar dónde podría estar en todos los sentidos”.