Para Jorge Ramos, las últimas semanas no han sido nada fáciles. El periodista fue el enviado especial de Univision para hacer la cobertura de la invasión rusa a Ucrania , y lo que vio, lo dejó con el corazón roto. Sin embargo, el comunicador de origen mexicano ya está de regreso y sus seres queridos lo han recibido con los brazos abiertos y listos para celebrar un año más de vida. Este 16 de marzo, Ramos cumple 64 años y en las redes sociales, su pareja Chiquinquirá Delgado, así como sus hijos, le dedicaron unos emotivos mensajes de cumpleaños.
‘Chiqui’, con quien tiene más de 10 años de relación, compartió en Instagram stories una fotografía de Jorge y la acompañó con las siguientes palabras: “Que tu vida sea tan especial como tú”, y agregó un emoji en forma de corazón.
También replicó una fotografía de una reunión en familia, donde aparecen los hijos del periodista, mientras él luce la cara cubierta de pastel. En la imagen, están etiquetados Nico Ramos, hijo menor de Jorge, además de María Elena Dávila, la hija mayor de ‘Chiqui’ con su expareja, Guillermo Dávila.
En tanto, Paola Ramos, la hija mayor del periodista, también aprovechó sus plataformas digitales para desearle lo mejor. ‘Pao’,como le dice su papá te cariño publicó tres imágenes del periodista acompañadas por unas palabras: “Happy birthday @jorgeramosnew. A por más aventuras. Te queremos”.
Los días más amargos
Hace un par de semanas, Ramos viajó a la frontera de Ucrania con Polonia para reportar lo que sucedía en la guerra y la situación de los refuagiados, los cuales, según cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ya suman más de tres millones.
En su columna de la semana pasada, titulada Los niños de la guerra, publicada en el portal de Univision.com, Ramos expresó su sentir sobre todo lo que había visto en sus dos semanas en Polonia y Ucrania, donde vio miles de desplazados y sintió la desesperanza como nunca antes. “La palabra ‘descorazonado’ es perfecta para describir cómo me he sentido estos últimos días en Ucrania y en la frontera con Polonia. Cuando esos niños ucranianos crezcan ¿qué es lo que van a recordar y contar? Quizás que el mundo los vio perderlo todo - familia, casa, país - y que no hizo nada”.