Rashel Díaz estuvo desaparecida de las redes sociales por un rato y sus fans de inmediato supieron que algo no estaba bien. Ante los mensajes de preocupación de la presentadora de TV, Rashel reveló este jueves en sus historias de Instagram que su mamá, Bárbara Paz, había sido hospitalizada de emergencia, pues al llegar con presión alta, los médicos la detuvieron para hacer más estudios.
“Hola, mi gente. Desde ayer ando perdida...”, dijo desde una habitación vacía del hospital. Rashel se mostró tranquila en todo momento, confiando en que todo saldría bien. “Le están haciendo ciertas pruebas, es algo que no nos esperábamos para nada. Confiando en Dios siempre”, dijo en sus videos. Rashel, quien recién batalló con COVID, aseguró que ni ella ni su mamá dieron positivo en esta visita al hospital, pues fue una de las principales preocupaciones ahora que las cifras de contagios van en aumento.
Por suerte, todo salió bien. Y este viernes Rashel recibió muy buenas noticias de parte de los médicos. “Mi mami está bien. Ya me dieron resultados de todos los exámenes y gracias a Dios sólo fue un sustito. Los resultados dieron negativos, la alta presión que tenía ya la estabilizaron y lo que se pensaba que tenía, ya se descartó”, dijo contenta.
La reacción de Rashel Díaz
Ahora sólo es cuestión de trámites para que llamen a Rashel y pueda ir por su mamá para llevarla a casa, ya que desde ayer se suspendieron las visitas y la compañía por el alto riesgo de contagio de Coronavirus. Sin embargo, mientras esperaba los resultados de las pruebas, la también empresaria se puso a pensar en cómo reacciona la gente cuando recibe noticias inesperadas.
Dirigiéndose a sus seguidores, expresó: “Me ha tocado ver a mi alrededor personas que al ver algo inesperado, y que obvio te pega en la emoción porque es alguien que amas con locura, como yo a mi mamá, la reina de mi vida... Cómo reaccionamos, que somos tan diferentes porque hay personas que les da por llorar, hay quienes se paralizan, quienes no actúan, se ponen de mal humor, hay quienes se quedan sin tomar acción... ¡De todo!”.
Y continuó: “He aprendido a confiar en Dios y agradecerle, porque si mi mamá no hubiese ido al hospital, no se hubiese dado cuenta de lo que le estaba pasando y reaccionó rápido. Lo segundo es mantener actitud positiva, aunque las emociones se apoderen de nosotros porque estamos asustados, porque es alguien a quien amamos”. Confiada en que todo saldría bien, agregó: “Pero ¿qué podemos hacer nosotros? Orar y mantener esa actitud positiva”. Una actitud que hoy aumenta gracias a los buenos resultados en la salud de su mamá.