La campeona olímpica Simone Biles alzó la voz frente al Congreso estadounidense en un emotivo testimonio junto con otras jóvenes gimnastas que sufrieron una serie de agresiones contra su integridad física por parte del médico de la selección nacional, Larry Nassar. La atleta culpó no solo a la organización de gimnasia sino también a las autoridades federales por su falta de acción ante los crímenes perpetrados a cientos de jóvenes deportistas.
La joven de 24 años ha exigido una explicación a las dos décadas de constantes abusos y no dudó en alzar la voz en busca de un cambio radical ante esta triste realidad. “Nos han defraudado y nos deben explicaciones. Un sistema entero permitió y perpetró. Echo la culpa a Nassar y a todo el sistema que permitió y perpetró ese abuso. USA Gymnastics y el Comité Olímpico y Paralímpico Estadounidense sabían que estaba sufriendo abusos por parte del médico oficial del equipo” aseguró Biles.
“Si permites que un depredador le haga daño a niños, las consecuencias serán prontas y severas”, añadió. La gimnasta Maggie Nichols, la primera víctima que denunció los abusos a USA Gymnastics, la federación estadounidense de gimnasia, también compareció ante los legisladores.
Biles y Nichols son algunas de las más de 200 mujeres que en 2018 relataron ante un tribunal los hechos que marcaron la vida de este grupo de deportistas.
Nassar fue acusado de abusos por más de 330 mujeres en USA Gymnastics y la Universidad estatal de Michigan State. Actualmente cumple cadena perpetua.
Biles es la más conocida entre las que denunciaron sus abusos. Tras romper su silencio, la medallista olímpica dijo sentirse “aliviada” después de haber sentido “mucha presión” por haber guardado la verdad en secreto durante tanto tiempo.