Jacky Bracamontes y Carlos Ponce nos comparten detalles de su participación en Miss Universo 2021

Jacky: Muy emocionados, muy contentos... honrados y agradecidos de que nos hayan elegido a Carlos y a mí para estar al frente de esta transmisión en Telemundo, este domingo a las 8 de la noche de esta edición 69 de Miss Universo. Afortunada de que me toque hacer mancuerna con Carlos porque es un show complicado, así que me tocó con el mejor.

Carlos: Para mí no hay nada mejor que sentirte protegido en un programa donde todo puede pasar porque estás en vivo trabajando con Telemundo y con otras productoras para llevar a cabo el programa, entonces es mucha logística.

Jacky: Yo también tenía esa duda de cómo lo iban a manejar y la verdad que Miss Universo se está tomando esto muy en serio. Las medidas son extremas, tenemos que hacernos pruebas todos los días. A las chicas también todos los días les hacen las pruebas, todo el tiempo están con tapabocas.

Carlos: Telemundo lo hace muy bien, siempre lo ha hecho. A nosotros nos consta que hay un gran despliego y están arriba de todo el mundo.

Jacky: Bueno, todas las latinas me tienen enamorada y platiqué con ellas porque va a salir un programa especial que se llama “Las nuestras” que me tocó grabar para este sábado a las 7 de la tarde que saldrá en telemundo.com y en canal de YouTube de Telemundo y pude conocerlas más a fondo, así que las latinas estamos fuertes. Me acuerdo que en la edición pasada me llamó mucho la atención Tailandia, era la favorita, y este año también está muy guapa y muy fuerte la tailandesa.

Carlos: No me atrevo a decirte específicamente porque tuve ciertas limitantes con dos o tres en la edición anterior que me llamaron la atención. No necesariamente la que recibe más prensa es la persona o candidata que merece esa corona.

Con ganas de subirme nuevamente a ese escenario y tener otra oportunidad (risas). Hace 20 años, literal, era una chavala, entonces no tenía tablas ni experiencia, no tenía lo que tengo hoy. Me trae recuerdos hermosos porque Miss Universo me marcó de una forma muy especial porque conocí el fracaso por primera vez. Para mí fue muy fuerte el no haber pasado a las finalistas, no haber sido Miss Universo. Me hizo crecer muchísimo y me hizo darme cuenta de muchas cosas, valorar más que nunca a mi familia, a la gente que estaba ahí, plantearme claramente las metas, lo que venía, enfocarme en el futuro y no en el pasado. la verdad que fue un evento que me cambió la vida, entonces estar ahí es un regalo hermoso, soy fan de Miss Universo y me encanta formar parte de alguna forma de este certámen.

Carlos: Jacky, te das cuenta de que si tú no te caes, no te levantas, ¿me explico? Es muy importante porque necesitas el impulso, necesitas a lo mejor que si estás un poquito subidito... a mí me ha pasado, lo tuve y qué mejor que tu círculo de gente te pone las botitas de plomo. Esas cosas no pasan sin una caída, sin un tropezón.

Bueno, la belleza también ha marcado mi vida desde un principio, pero no nada más la belleza física sino también hay que trabajar en esa belleza interior que para mí es muy importante. Veo bellezas físicas y luego te pones a hablar y la miras a los ojos y no te da más. Como lo sabemos, esa belleza física se termina yendo sí o sí. El lado espiritual es importante, ahora estoy picadísima leyendo libros que me encanta porque viajo a mundos increíbles. Uno nunca debe dejar de trabajar en uno mismo y yo ahí sigo.

Fue muy fuerte porque yo ya me hacía de las favoritas, pensaba que iba a pasar y que iba a estar ahí porque en el ensayo general me tocó estar entre las top 5, contesté una pregunta en inglés con Naomi Campbell al lado, es más los que estaban ahí en el ensayo me aplaudían y entonces me creía lo máximo. Diosito me puso la manita ahí diciendo que me espere, que no las puedo todas. El golpe fue duro porque en mi cabeza nunca estuvo la opción de no pasar a la finalistas, fue una lección muy grande de que siempre hay que analizar todas las posibilidades, ponerle todas las ganas de hacer las cosas bien al representar a mi país, que es un regalo hermoso pero una gran responsabilidad. Lloré mucho esa noche y además teníamos que salir de adorno con traje de baño... lo único que quería era salir corriendo de ahí pero me tocó quedarme y esa fue otra gran lección. Al día siguiente no solté una lágrima más y salí adelante con la ayuda de mi familia.

No sería de las mamás que presionarían en ese tema. Fue una experiencia increíble para mí, pero si una de mis hijas elige vivir una de esas experiencias como la mía, por supuesto que la apoyaría... es más, les pasaría algunos tips y las acompañaría; sin embargo, no sería algo que yo se los maquinaría e inculcara, no.

No nos dejaron platicar mucho. Nos encontramos precisamente en el lugar en donde nos hacen las pruebas de COVID. Está muy bien, tranquila, muy segura, la veo guapísima, por supuesto, la veo firme en sus convicciones.

Mucho y es muy bonito verlo crecer y ver el mundo crecer. Ser testigo de ver como poco a poco, porque aún nos falta, este tipo de plataformas, que brindan mucho, empiezan a recibir a personas que están realmente informados, que tienen una cultura mundial, que saben lo que está pasando y que pueden decir en voz alta su opinión inteligente, una opinión diplomática para no lastimar o entrar en conflicto con religión y ese tipo de cosas; pero me parece que sí ha evolucionado mucho en ese sentido, sobre todo, en las candidatas que han venido llegando en los últimos años.