Francisca Lachapel nos enseña las invitaciones de su boda ‘que no sucedió’

Desde la comodidad de su casa, Francisca Lachapel sacó las invitaciones “de mi gran boda que nunca pasó”. La presentadora de Univisión se quedó con todas ellas, pues la pandemia se interpuso en los planes y jamás pudo enviarlas dada la incertidumbre de la situación.

Francisca se tomó mucho tiempo para crear una invitación especial, que no sólo informara a sus amigos y familiares del día y el lugar de la boda. “Como ya no se va a llevar a cabo, de todas maneras quiero enseñarles lo bonitas que eran”, dijo entre risas antes de encontrar la invitación de colegas como Alejandra Espinoza y Alan Tacher.

“Ya me río. Pero al principio sí me dolió. Fue tanto amor, tanto trabajo puesto en esto que no llegó a ocurrir”, expresó. Sin embargo, la futura mamá ha dejado atrás ese sentimiento pues considera que “Dios siempre sabe lo que hace”.

Francisca eligió una caja en la que pondría varias cosas, según detalló en su video. “Quería que fuera en una cajita para que la gente tuviera la sensación de sorpresa cuando abriera todo”, explicó antes de quitar la cinta que aseguraba la caja de cartón en la que también se podía ver el sello postal.

Cubierta con papel y decorado con listones en tono madera, Francisca sacó una carta de la caja, y después cubrió lo demás para no adelantarse a los detalles dentro de la caja.

Era un cuento de hadas porque la idea era todo esto de los castillos, y la princesa de Azua, pero en Italia. En la carta se podía leer que la pareja había encontrado el lugar ideal para la ceremonia religiosa, y esperaban contar con su asistencia.

El texto, que podía ser enviado en inglés o español, también pedía a sus invitados que por favor no compartieran la invitación en las redes sociales o con los medios de comunicación. Al final estaba firmada por Francisca y Francesco.

Aunque no dijo específicamente cuándo se habría casado, en las imágenes que compartió se aprecia la fecha 06/13/2020. Francisca también detalló que la boda sería en una ciudad medieval en Italia, país de donde es originario Francesco.

La ceremonia se habría realizado en la Arezzo Cathedral, en la Plaza de Duomo, en la Toscana. La cita era a las 15:30 horas. Los pasaportes estaban impresos en inglés, español e italiano, por los invitados de la pareja.

Considerando que la boda sería en Italia, la ex Nuestra Belleza Latina incluyó un pasaporte para sus invitados. Sellado con cera en donde destacaban las iniciales FF, Francisca mostró que en la primera página y en una réplica de un pasaporte oficial, en donde ambos aparecen en un lindo posado.

En las demás páginas del pasaporte, la pareja contaba su bella historia de amor, desde cómo y dónde se conocieron en Miami, pasando por su primer viaje a Italia, luego a República Dominicana y, el inolvidable viaje a Dubái, en donde se comprometieron.

Dentro del pasaporte también incluía un boarding pass en el que se especificaban los detalles de la boda, como la fecha y el lugar.

Francisca pensó en todo, y el save the date fue un imán que los invitados podrían pegar en la nevera o en cualquier lugar que les recordara el día. “Era para que no hicieran planes de nada, y supieras que la boda era ese día y contáramos con tu presencia”, explicó la novia.

El último detalle fue un mapa de Italia, en el que la pareja señaló la ciudad de Arezzo, en la que se habrían casado. Aunque los preparativos le trajeron un poco de dolor por la boda que no pudo realizar, Francisca hizo esta demostración para soltar los recuerdos.

“Dicen que llegan cosas mejores. ¿Para qué voy a tener eso guardado, amontonado. Ya no lo puedo mandar. Así que por eso decidí compartirlo porque ya he sanado mi dolor de no haberme casado”, dijo desde el fondo de su corazón.

Aunque hoy Francisca y Francesco están dedicados a la próxima llegada de su primer bebé, la presentadora dejó entrever que cuando las cosas mejoren sí habrá boda, aunque quizá no con los mismos planes que tenía.

Y como no podrá usar sus invitaciones, prometió que hará otras “más espectaculares” y aconsejó a futuras novias tomar su idea ya que ella no la utilizaría.

A pesar de los detalles que se quedaron atrás, Francisca y Francesco tuvieron su día especial el 31 de diciembre de 2019. A la orilla del mar, la pareja se dió el “sí, acepto”, una noticia que sorprendió a todos y que semanas después se sumó a su bella historia con el anuncio de su dulce espera.