,type=downsize)
Gabriel Soto e Irina Baeva han pasado días separados debido al trabajo que la actriz tiene en Nueva York. Mientras ella se encuentra en La Gran Manzana, él está en México lejos de su novia y extrañándola mucho. Pero esos días pronto terminarán, pues al parecer Gabriel ya tiene listas las maletas para que, en cuanto su agenda se lo permita, viaje a Estados Unidos para volver a estar cerca de la chica que tanto ama.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Enamorado, nostálgico pero con muchas ilusiones de volver a abrazar a Irina, Gabriel publicó una linda foto de ambos, ya listo para estar a su lado. “A pesar de la distancia, más enamorados y unidos que nunca”, escribió el protagonista de Soltero con Hijas junto a la imagen.
Con sus palabras no sólo le asegura a su novia lo mucho que la quiere, sino que calla los rumores que en los últimos días suenan en torno a ellos y a una supuesta ruptura ocasionada por la distancia. “¡¡Te AMO!! Ya falta menos para estar juntos, mi amor”, agregó en su tierno mensaje.
Irina Baeva y su experiencia en Nueva York
La actriz rusa también extraña a su amor, pero mientras vuelven a estar juntos aprovecha el tiempo para divertirse y conocer Nueva York. En estos días, además de recorrer las famosas calles de esta ciudad, visitó el Museo de Arte Moderno (MoMA, por sus siglas en inglés), se tomó varias fotos con las icónicas fachadas neoyorquinas de fondo y turisteó junto a uno de sus amigos, con quien cenó platillos exquisitos.
Y aunque la chica de 27 años procura hacer de este viaje algo positivo e inolvidable, hubo una experiencia con un paparazzi que la hizo perder la calma. Durante un recorrido para hacer ejercicio por Central Park, Irina se topó con un reportero que no la dejaba de grabar ni de preguntar por Gabriel Soto. Indignada, contó con la ayuda de otros corredores para que la dejaran en paz, momentos que documentó en sus historias de Instagram.