María Celeste Arrarás y su hijo Adrián Vadim van rumbo al estrellato

Adrián: Tengo muchas emociones, pero principalmente siento una mezcla de nervios y entusiasmo porque llevo más de un año trabajando en este proyecto.

Adrián: Yo cantaba a solas desde que tenía 14 años y en 2016, cuando tenía 17 años, vi un concierto acústico de Justin Bieber y al ver como conectó con la audiencia me quedé impactado. Fue ahí cuando supe que quería que mi música también provocara emociones fuertes. Ese concierto de Bieber lo escucho al día de hoy con mucha frecuencia.

Adrián: Bueno, tú me escuchaste cantando en la ducha y pensante que era la radio y me dijiste que bajara la música. Y cuando te dije que era yo al salir del baño te quedaste asombrada, creo que un poco confundida.

Adrián: Me gustan cantantes como Ed Sheeran y Justin Bieber. Cuando ellos cantan es tan natural que parece que hablan y cantan a la vez, cuentan historias. Eso es lo que trato de lograr con mis canciones.

Adrián: Me siento confiado porque al ser mi mamá, sé que estás protegiendo mis intereses y eso me da tranquilidad. Pero eres muy exigente.

Adrián: Espero que para ese entonces el coronavirus ya esté bajo control y poder presentarme en vivo ante el público. Me gustaría pensar que me va a ir bien y que estaré trabajando en nuevas canciones. Tengo muchas canciones guardadas en mi corazón.

Adrián: Algún día me gustaría un dueto con Camila Cabello o Ed Sheeran.

Adrián: El lado bueno es que sé que cuento con una profesional incondicional y que nunca me vas a traicionar. Y sobre todo que me cuidas, al mismo tiempo que me guías. El lado malo es que no tienes filtros y cuando criticas, no tienes misericordia (risas) y a veces me duele lo que me dices , pero luego entiendo que lo haces por mi bien, para que mejore.

Adrián: A trabajar duro como tú siempre lo has hecho. Y a ser persistente como has sido en tu carrera.

Adrián: Creo que sí, pero hasta que no pase no estoy seguro. Tengo un poco de práctica por haber estado a tu lado y ver cómo manejas tu fama. En pocas palabras, he tenido una buena maestra.

Adrián: Honestamente, en una computadora nueva especializada en videojuegos y cuando logre hacer suficiente dinero, me compraría un apartamento de dos cuartos para que mis hermanos y tú puedan visitarme.

Adrián: Todo comenzó cuando te contrataron para grabar la versión en audio de tu libro “El Secreto de Selena”, con el productor musical, ganador de un Grammy, Joel Someillan. Recuerdo que un día le dijiste que yo quería ser cantante y él quiso escucharme. Cuando fui a su estudio, rápido nos caímos bien y acordamos trabajar juntos. Para escribir las canciones, identificamos un concepto basado en una historia mía, él me entrevista y jugamos con frases y palabras hasta que se arma la canción. La canción toma vida propia. Hoy en día Joel y yo somos tan cercanos que le llamo “tío”.

Adrián: En situaciones que me han tocado vivir. Pueden ser experiencias difíciles o intensas o que me han hecho feliz. Todas mis canciones cuentan una historia íntima con la que otros se pueden identificar.

Adrián: Pues, sin que se revele una sorpresa, una de mis canciones que el público escuchará próximamente tiene mucho que ver contigo. Sin ti, esa canción no existiría. Pero es sorpresa, incluyendo para ti.

Adrián: Una vez me dijiste que para triunfar en la vida uno tiene que ser de mente abierta. “El mundo no es blanco y negro, es una amplia gama de grises”, me dijiste y eso no lo olvido porque como sabes soy bastante cabeza dura y a veces me enredo.

María Celeste: Hijo, en la vida uno tiene que ver las cosas siempre de manera positiva y ponerlas en perspectiva. Si tuviese que hacer mi programa diario hoy en día, no podría sumergirme contigo en este proyecto tan importante para ti. Este es tu momento. Yo he hecho de todo y seguiré involucrada en otros proyectos, pero en este momento nada me entusiasma más que verte dar pasos certeros hacia tu futuro. Lo que demuestra, una vez más, que todo lo que pasa sucede por una razón poderosa que a veces no lograremos identificar de una manera inmediata.

María Celeste: (Risas) Es una buena pregunta. Sí, claro que me pidieron “Space” en un par de ocasiones. Y uno sufre mucho porque usualmente te piden espacio cuando tú lo que quieres es estar más cerca que nunca de esa persona amada. Y, admito que, también yo le pedí espacio a más de un novio y también sufrieron. Por eso es una canción que va a tocar a tantas personas. Me encanta esa parte donde dice que me pediste espacio y ahora “la soledad está ocupando tu lugar.”

María Celeste: Como algo que estaba predestinado, algo que tenía que pasar. Es mágico para mí ser testigo de tu desarrollo como artista.

María Celeste: Me preocupé muchísimo porque sé que esta carrera es muy difícil. Hay millones de chicos tratando de lograr lo mismo que tú y solo un puñado lo logra. A veces hay quienes alcanzan el éxito en la industria de la música y ni siquiera tienen talento. Hay muchas cosas en juego y lo menos que deseaba para ti es estar expuesto al rechazo. La gente juzga mucho y más aún si eres hijo de alguien que es figura pública, como en tu caso. Por eso acepté respaldarte en todo con la condición de que continúes tus estudios, como lo estás haciendo.

María Celeste: Muchas cosas. Las mamás vemos diferentes escenarios al futuro y nos programamos para proteger a nuestros hijos de cada uno de ellos. Me preocupa que te vaya muy bien, muy rápido y que eso distorsione tu percepción de la realidad. Aunque sé que te he enseñado a tener los pies bien firmes sobre la tierra y espero que esos valores te sirvan de brújula. Me preocupa que te cueste despegar y lograr tu sueño. No quiero que ni tus hermanos ni tú sufran y cuando uno está ante el ojo público y es juzgado por multitudes, en algún momento se sufre.

María Celeste: Simple, sé tú. Tienes todo para hacer muy feliz a la chica de tu elección. Y esto no viene desde el punto de vista de una mamá. Tú logras que todo el mundo te quiera. Recuerdo que de pequeño las maestras lloraban cuando pasabas de grado y les tocaba despedirse de ti.

María Celeste: Todo el mundo recuerda esa primera canción y ese primer beso. Pero a veces esa primera canción ni ese primer beso son los más memorables. La vida te guarda lindas sorpresas a través de la vida. Por eso vale la pena vivir.

María Celeste: Que sean buenas personas, como hasta ahora, porque cuando eres exitoso como ser humano, indudablemente eres feliz. Y también espero que cuando sea una viejecita me cuiden mucho y me lleven a vivir con ustedes ( risas).

María Celeste: Sigo aprendiendo, pero de manera inmediata lo que más me ha entusiasmado es que producir una canción es en muchos aspectos como producir un programa o una miniserie, cosas que yo he hecho. Todo requiere de mucha visualización, de poder ver en tu mente el proyecto final antes de que se materialice. Así que en ese aspecto, me viene fácil.

María Celeste: Como una etapa que nunca olvidaremos. Una etapa en la que nos estamos compenetrando en otro plano. Para mí es un regalo.

María Celeste: Es que si te haces famoso, me imagino que contratarás un equipo con experiencia en este campo para ayudarte a seguir creciendo. Yo siempre voy a estar supervisando, asegurándome de que nadie trate de aprovecharse de ti y protegiéndote; pero eventualmente el día a día estará en manos de otros y yo me dedicaré a aplaudirte en tus presentaciones.

María Celeste: Nunca, jamás. Ha sido una linda sorpresa. Y las cosas siempre tienen su razón de ser. Hizo falta que ya no estuviese en mi programa de televisión para poder dedicarme de lleno a este proyecto, para concentrarme al 100 por ciento en tu lanzamiento.

María Celeste: Tienes una voz particular y eso es bueno en este negocio, además tienes canciones muy comerciales, con las que todo el mundo se puede identificar de una manera u otra. Te mereces todo el éxito del mundo porque has dado el máximo, le has dedicado todo tu esfuerzo.

María Celeste: Se trata de una industria de la cual no tengo mucho conocimiento en el sentido de manejar, de administrar, de ser la mánager de un artista, pero aprendo rápido y tengo toda la disposición del mundo para que a él le vaya bien al caminar esos primeros pasos. Sobre todo, me gusta saber que lo puedo llevar de la mano, para que dé sus primeros pasos.

María Celeste: Lo primero, que tiene una gran voz, eso es fundamental. Él canta precioso y creo que eso le ayuda porque le abre la puerta a que la gente lo escuche. Segundo, que tiene una gran perseverancia y disciplina, llevaba años queriendo hacer esto. No sabía personalmente si dejar que se lanzara a esta profesión que puede ser tan ingrata, traicionera y tan difícil. Insistió y me dijo que seguiría estudiando paralelamente con buscar su oportunidad en el mundo de la música.

María Celeste: Ellos están felices porque mis tres hijos crecieron en el ambiente de las cámaras de televisión, de las sesiones de fotos. Ellos estuvieron en la portada de HOLA! cuando Adrián tenía unos 22 meses de nacido, poco menos de dos años. Es un trabajo pesado que mis otros dos hijos detestan porque tienes que estar posando para la cámara, viendo que ropa te vas a poner, tantos detalles que hay que cuidar para que una sesión de fotos quede bien. Así que ellos están encantados que sea Adrián al que le guste todo esto. Lo están aplaudiendo, lo están apoyando. Ellos dan mucha opinión con respecto a lo que es la música, los videos, las portadas, etc.

María Celeste: ¡Sí! Ya me han dicho suegra. Es muy curioso porque hace unas semanas atrás, cuando empezamos a hacer las pruebas de la canción Space, su sencillo, una noche estaba estaba en mi cama monitoreando el lanzamiento de prueba y escribió su primera fan desde Tailandia. Me quedé tan sorprendida porque es tan difícil de creer lo que hacen las comunicaciones hoy en día. Desde entonces, muchas chicas han escrito; pero, bueno... Eso es algo para que él lo diga.