La rutina de Rashel Díaz cambió por completo hace una semana, cuando por decisión de los directivos de Telemundo, salió de Un Nuevo Día . Aunque no fue la mejor noticia, poco a poco la presentadora llena su agenda con nuevos proyectos que la hacen mirar hacia adelante y que empiezan a formar una nueva rutina en su día a día.
Y, ¿cuál es su siguiente paso? La cubana contó que entre sus panes, lo primero es dormir. “Hoy me levanté y entrené, porque el ejercicio para mí es fundamental”, dijo contenta. Como una mujer de fe, también oró por la mañana, algo que antes hacía de noche, pues debía levantarse en la madrugada para llegar a tiempo al set de grabación.
El tiempo libre ha sido muy bueno para su relación familiar. Además de charlar con su esposo, Carlos García, sobre los planes a futuro, llamó a su mamá por teléfono con una calma que antes no tenía. Su tesoro más grande, sus hijos Juan Daniel y Daniela, también son parte de esta nueva vida en la que puede verlos mucho más.
Del lado profesional, Rashel está enfocada en la empresa Monat, de productos de belleza que la tiene muy ocupada. “Mi oficina. El lugar donde trabajo en mi hogar, donde me conecto con ustedes cuando hago los live, donde realizo mis reuniones vía zoom y mucho más. En conclusión... mi lugar”, explicó para sus fans mostrando su espacio laboral.
Una mamá orgullosa
Aunque los retos profesionales son distintos, Rashel Díaz está contenta de poder pasar más tiempo en casa junto a sus hijos. Como siempre lo ha dicho, es muy complicado reunir a los dos, pero cuando están en casa, ella saca el mayor provecho del momento para divertirse en familia. Al observarlos, se siente plena por la relación y complicidad que ve en ellos.
“Una vez leí por ahí que ninguna relación es como la de hermanos. Ni la de pareja, ni la de amigos, ni la de madre e hijos. Nuestros hermanos y hermanas están ahí desde el amanecer de nuestras vidas hasta el inevitable atardecer”, recordó Rashel al pensar en sus hijos.
“La unión de hermanos es la que tiene más igualdad; tal vez por la crianza, por haber vivido tantas cosas juntas desde pequeños, por ver la vida desde el mismo ángulo... y saben, puede que sea cierto”, agregó pensativa. ”La verdad cuando veo las miradas cómplices entre mis hijos, entiendo un poco este concepto”, aseguró orgullosa. Y con amor, les envió un bello mensaje: ”Que nunca se acabe esa complicidad entre ustedes. Los amo”.