A pasado un poco más de un mes del sensible fallecimiento de Álex Lequio, el hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio. El joven perdió la vida el pasado 13 de mayo, en Barcelona, tras una intensa lucha contra el cáncer, y desde entonces familiares y amigos han estado a la espera de las condiciones necesarias para poder darle el último adiós. Aún con los sentimiento a flor de piel, este martes 30 de junio se llevaron a acabo los servicios fúnebres en honor a Álex al que acudieron sus padres y su círculo íntimos de allegados.
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La exequias se realizaron en la parroquia Nuestra Señora de la Moraleja, lugar en el que se dieron cita sus seres queridos y todos aquellos que han querido acercarse para recordar la vida de Álex Lequio. Este es, sin duda, uno de los trances más duros y emotivos que han vivido en las últimas semanas Ana Obregón y Alessandro Lequio.
La expareja ha hecho gala del apoyo y entendimiento que tanto les ha ayudado a tratar de superar el peor golpe que les ha deparado la vida.
En todo este tiempo, además, la actriz ha sufrido la pérdida de la perra fiel de la familia, Luna, y ha celebrado el que habría sido el cumpleaños número 28 de su hijo. Horas antes del funeral, era Celia Vega-Penichet, prima de Álex Lequio, quien le dedicaba un tierno mensaje al plasmar, junto a un corazón y a una imagen del cielo al anochecer, las frases: ‘Hoy honraremos tu vida’ y ’Hasta que nos encontremos de nuevo’.
Asimismo, muchas personalidades del medio artístico español hicieron acto de presencia en solidaridad a la familia que sigue tratando de superar la pérdida irreparable de su hijo.
Según detalles compartidos por nuestro sitio web hermano ¡HOLA! España, la ceremonia tuvo un marco sobrecogedor. La iglesia inundada de flores y el altar se transformó en un auténtico jardín de rosas, al igual que los banquillos, en los que se estableció la pertinente distancia de seguridad entre las personas que se sentaron en ellos.
En cuanto a la misa, se desarrolló de una forma muy emotiva, con continuas referencias al hijo de Alessandro Lequio y Ana Obregón y con un coro que se encargó de interpretar varios temas seleccionados por la intérprete.
Ana Obregón llegó a la iglesia acompañada por una de sus dos hermanas, Amalia, y por la novia de su hijo, Carolina. Al entrar, quiso darse la vuelta para saludar a los medios de comunicación y se tocó el corazón en clara señal de agradecimiento por las muestras de cariño.