Vanessa Bryant conmovió el corazón de todos este lunes 24 de febrero, en el Staples Center, en Los Ángeles. La esposa del fallecido Kobe Bryant ofreció unas emotivas palabras en memoria del padre de sus hijos, dejando ver su faceta más íntima. A pesar de estar sufriendo la trágica pérdida del hombre de su vida y de su hija Gianna, Vanessa se armó de una gran fortaleza y ante la audiencia dio un discurso de lo más especial. Luego de dar unas palabras para su ‘Mambacita’, la madre de cuatro se dirigió a Kobe, con el cual estuvo 20 años de su vida.
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En su discurso, Vanessa destacó que, aunque él era toda una celebridad, ella no podía verlo así. “Él era mío. Él era mi todo. Kobe y yo hemos estado juntos desde que yo tenía 17 años y medio”, dijo. “Fui su primera novia, fui su primer amor, su esposa, su mejor amiga, su confidente y su protectora. Él era el esposo más increíble”.
“Realmente teníamos una asombrosa historia de amo. Nos amábamos con todo nuestro ser, dos seres perfectamente imperfectos tratado de hacer una bonita familia criando a nuestras dulces e increíbles hijas”.
Vanessa confesó que él era el más romántico de los dos en su relación. “Recuerdo cada uno de nuestros días celebrando San Valentín y nuestros aniversarios”, indicó. “Él planeaba viajes especiales y regales muy tradicionales cada año, durante nuestro matrimonio. Él incluso hizo a mano algunos de mis regalos más valiosos”.
La madre de 37 años recordó una ocasión en la que Kobe le regaló el libro y el vestido azul que Rachel McAdams usó en la película Diario de una pasión (The Notebook). “Cuando le pregunté que por qué había elegido el vestido azul, él me dijo que era por la escena en la que Allie regresa con Noah”.
La amorosa madre agregó que la estrella del basquetbol adoraba ver las típicas películas sentimentales. “A él le gustaba ver Quédate a mi lado (Stepmom), Magnolias de Acero ( Steel Magnolias) y Mujercitas (Little Women). Él tenía un corazón tierno”.
Como padre de cuatro niñas, Vanessa dijo: “Kobe era el Jugador Más Valioso (MVP, por sus siglas en inglés) como papá de puras niñas. Él nunca dejaba el asiento del baño arriba. Siempre les dijo a las niñas lo hermosas e inteligentes que eran. Él les enseñó como ser valientes, como seguir esforzándose cuando las cosas se ponían rudas”.
“Quiero que mis hijas sepan que su padre fue un asombroso esposo y papá. El tipo de hombre que quería enseñarle a las futuras generaciones a ser mejores y evitar que cometieran sus mismos errores”.
Entre lágrimas, Vanessa concluyó su discurso con lo siguiente: “Dios sabía que no podían estar en la Tierra el uno sin el otro. Tenía que traerlos a casa para tenerlos juntos. Cariño, cuida de nuestra ‘Gigi’. Tengo a Nata, Bebe y KoKo. Los amamos y los extrañamos, mi ‘Boo’ y ‘Gigi’. Que ambos descansen en paz, diviértanse en el cielo hasta que nos volvamos a encontrar algún día. Los amamos a los dos y los extrañamos por siempre y para siempre. Mamá”.