Aunque hoy es considerada una de las actrices latinas más exitosas de Hollywood, Eva Longoria pasó momentos muy difíciles en los inicios de su carrera. Con el corazón lleno de ilusiones, ella salió de Texas para perseguir sus sueños, y aunque las cosas tomaron tiempo para que salieran como lo esperaba, hoy piensa que quizá lo haría diferente.
"No es muy buena idea ir a otro sitio, otro estado, otro lugar sin dinero, sin amigos, sin familia y sin trabajo", expresó entre risas para El Gordo y la Flaca. En aquel entonces la ilusión de conquistar sus metas la movió para lograr salir adelante. "No sé qué pasó, pero creo que cuando quieres hacer algo, puedes hacerlo", reveló.
Eva Longoria llegó a la ciudad de los sueños con sólo 20 dólares, lo que en ese entonces significó todo un reto que, hasta la fecha, no sabe cómo logró superar. "Al momento que yo llegué a LA, yo estaba buscando trabajo. Toda mi vida he estado trabajando", recordó.
Sus inicios frente a las cámaras fueron como extra en cine y televisión. Y fue cuestión de talento y mucho esfuerzo lograr hacerse un lugar en el mundo del entretenimiento, mismo que guió su vida personal hacia un sueño dorado, pues el año pasado se estrenó como mamá junto a su esposo, José Bastón.
Eva Longoria, una mamá feliz
En junio de 2018, la actriz dio la bienvenida a Santi, su primer hijo, un bebé que le cambió por completo la perspectiva de la vida y por quien lucha día a día. Lejos de los esfuerzos laborales que hace por él, la también productora contó cómo es la personalidad el pequeño de un año.
"Es un niño sencillo. Come bien, viaja bien, duerme bien", detalló. Y en cuanto a los gustos culinarios del bebé, la orgullosa mamá reveló que no es muy fan de los tacos. "Le gustan las tortillas y le gusta la carne, pero junto no. Todavía no puede comer un taco", agregó contenta.
En cuanto a los genes, la amiga de Eugenio Derbez contó que su hijo es mucho más Bastón que Longoria. "Parce totalmente de mi marido", comentó entre risas.