Kim Kardashian jamás podrá olvidar aquella traumática experiencia que vivió en un hotel en Paris. Durante la semana de la moda de 2016, la socialité fue sorprendida durante la noche en su habitación por ladrones que la habían estado observando. Además de darle un gran susto en el que Kim temió por su vida, los hombres se llevaron algunas de sus joyas, entre ellas el costoso anillo de compromiso que Kanye West había diseñado junto a Lorraine Schwartz para prometerle una vida juntos.
En días pasados, Kim y sus hermanas Kourtney y Khloé posaron para una sesión de fotos en la que promocionaron su nueva fragancia Diamond. En las imágenes, la esposa de Kanye West aparece con una joya muy similar a la que le robaron en aquella ocasión. Al verla, sus fans se confundieron y pensaron que había recuperado el anillo de 15 quilates valuado en más de 4 millones de dólares; sin embargo, Kim aseguró lo contrario.
La verdad detrás de las joyas en su foto
“Todas las joyas que uso en esas fotos me las ha prestado Lorraine Schwartz”, dijo en una entrevista para Entertainment Tonight. Con un tono juguetón, Kim agregó: “Ha sido maravilloso que me haya dejado usarlas y poder devolverlas después”.
“Me divertí mucho haciendo esas fotos, me parecía que eran la ocasión perfecta para atreverme otra vez a llevar diamantes. Pero sólo cuando me los prestan por ese día”, explicó sobre la sortija. Eso sí, aclaro que la pieza es una réplica del anillo que su hoy esposo le obsequió en un estadio de béisbol en su cumpleaños 33, para proponerle matrimonio.