Tras los emotivos homenajes que recibieron los restos de José José en la Ciudad de México, su hija Sarita Sosa, compartió un sentido mensaje en sus redes sociales en el que, una vez más, se despidió de su padre. Casi a la par de esta publicación, sus hermanos mayores, José Joel y Marysol Sosa trasladaron a México la mitad de las cenizas de ‘El Príncipe de la Canción’ para sus homenajes y su posterior funeral.
A través de sus redes sociales, la joven compartió hace unas horas una extensa publicación, en la que refleja en dolor por el que está atravesando tras la pérdida de su padre. “Hoy brilla una estrella allá en el firmamento, tu luz no se apagará y brillará en todo momento. Tus huellas quedarán marcadas en este bendito suelo, ahora junto con los abuelos cantas en el reino de los cielos”.
“Ahora serás ese ángel que siempre estará conmigo, y mi corazón siempre estará contigo. Sé que me cuidas y me bendices de arriba, tú nunca morirás mientras tu voz siga viva. Aún veo tu reflejo cuando me veo en el espejo, y hoy que estás tan lejos quien me dará consejos”.
Sarita también habló en su mensaje de los desafíos que enfrentaron juntos. “A tu lado aprendí a pintar mis días grises. Tuvimos días duros y también días felices. Siempre serás el amor de mi vida, no te imaginas cuanto me dolió esta despedida. He tenido días de angustia y dolor, pero también la felicidad que estás en un lugar mejor”.
“Y no voy a negar que me he llenado de temor, pero gracias a ti aprendí a ser un gladiador. La promesa que te hice créeme que fue sincera, me preparaste papá para enfrentar el mundo afuera. Pero nunca estuve lista para el día en que te fueras. Cuando olvido quien soy tu me recuerdas quien tú eras”.
Los homenajes a José José en México
Luego de varios días de negociaciones, al fin los hijos de José José llegaron a un acuerdo. El cuerpo del cantante fue cremado y se dividieron las cenizas; de tal forma que José Joel y Marysol llevaron una mitad a México, mientras que la otra mitad permanecen en Miami.
En su país natal, ‘El Príncipe de la Canción’ fue homenajeado en el Palacio de Bellas Artes, la Basílica de Guadalupe, en la colonia Clavería (barrio donde creció) y por último, sus cenizas fueron llevadas al Panteón Francés, donde ya descansa junto a los restos de su madre.