Thalía es una amante de la adrenalina y estas fotos lo demuestran

La intérprete mexicana Thalía, de 47 años de edad, ha sorprendido a todos con su gran valentía, al hacer actividades a las que muchos le tienen pánico.

La esposa de Tommy Mottola ha demsotrado ser muy temeraria al realizar sus hobbies extremos y se dedica a practicarlos con una fascinación que sorprende a sus fans.

La mamá de Sabrina Sakaë y Matthew Alejandro publica, con cierta frecuencia, videos y fotografías que muestran lo bien que la pasa y lo mucho que disfruta la adrenalina.

Así sucedió recientemente cuando presumió sus grandes habilidades como trapecista. Sin embargo, esa no ha sido la única ocasión en que Thalía nos ha dejado boquiabiertos con su coraje. Para muestra, un botón.

El pasado 3 de agosto, Thalía realizó, la que quizá sea la actividad más extrema que le conocemos al convertirse en toda una trapecista de circo. En un video que compartió se le ve realizando diversos trucos como si se tratara de toda una profesional en la materia.

Thalía y su familia aprovecharon el incio de las vacaciones de verano para descansar en las playas de Italia.

Por medio de una serie de publicaciones, la artista presumió lo bien que la pasó junto a sus hijos, al lanzarse clavados al mar desde la parte más alta de un barco.

El secreto de belleza de Thalía no solo se debe al tipo de alimentación que lleva, sino a la exigente rutina de ejercicio a la que se somete para lograr lucir como en sus mejores años.

Así lo demuestra con sus sesiones de gimnasio, con las que exige al máximo sus límites físicos.

En el verano de 2018, Thalía nos dio muestras de que no le tiene miedo a nada y menos a las alturas, al lanzarse un clavado al mar desde una altura equivalente a tres pisos.

"Ahí te voy vida. Agárrame con mucho amor y aventura siempre", escribió la intérprete de No me Acuerdo y Desde esa Noche.

En junio de 2018, Thalía puso a prueba sus habilidades para escalar durante su visita a Via Ferrata Amangiri, donde presumió la fuerza de sus brazos y piernas durante su estancia en este espectacular sitio en Utah, Estados Unidos.

Además de aprovechar su visita a Utah para conquistar la cima de una roca, Thalía también quiso presumir sus habilidades para el rappel, al tomarse varias fotografías realizando esta emocionante actividad de descenso.

Aunque el yoga es una actividad poco arriesgada, Thalía le pone su grado de emoción y dificultad a este ejercicio, al haberlo realizado desde un puente colgante durante su visita a Utah.

La también actriz se paró en un pie y sin temor al precipicio comenzó a hacer su rutina.

El ser amante de la adrenalina tiene sus riesgos y así quedó demostrado en 2006, cuando Thalía sufrió un aparatoso accidente mientras esquiaba en la nieve.

A pesar del susto que se llevó, en febrero de este año la cantante volvió a las montañas de Aspen e hizo frente a sus miedos.

Además de saltar al mar desde la parte más alta de un barco, a Thalía también le apasiona esquiar en agua, surfear, hacer snorkeling y bucear, demostrando así que el agua es su elemento favorito al nunca sentirse insegura y al divertirse en ella como si no hubiera mañana.