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Han pasado unos meses desde que Raúl de Molina anunció que se internaría en una clínica especializada para bajar de peso y desde entonces, el presentador de El Gordo y la Flaca (Univision) ha mostrado mejor predisposición para seguir una estricta rutina deportiva y de alimentación para lograr sus objetivos. El popular compañero de Lili Estefan ya ha logrado bajar más de treinta libras y, durante su paso por la alfombra magenta de Premio Lo Nuestro, lució su nueva figura.
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Asegura que no ha sido fácil, pero, "con mucho sacrificio", "organización" y la ayuda de los especialistas, está logrando lo que se propuso hace un tiempo: tenar una vida mucho más saludable. A finales de marzo, tiene un viaje programado al País Vasco donde disfrutará de "los mejores restaurantes de la zona de dos y tres estrellas Michelín". ¿Logrará mantener la dieta? Él mismo lo cuenta, en exclusiva, para HOLA! USA.