Heredara de la discreción con la que siempre se manejó su padre, el fallecido Steve Jobs, la heredera del creador de Apple es hoy noticia, pero no por nada escandaloso, Eve Jobs ha llamado la atención de los medios al mostrarse enamorada nada más y nada menos que de un mexicano que desde hace un tiempo robó su corazón. El responsable de las sonrisas más francas de la joven de 19 años es Eugenio Garza Pérez, de 21 años de edad, quien pertenece a una de las familias más acaudaladas de nuestro país, según reportan varios medios internacionales.
Dese hace unos meses, Eve se da vuelo compartiendo fotos con el dueño de su corazón, quien es en nuestro país heredero, igual que ella, de uno de los imperios empresariales más importantes de Monterrey. Eugenio Garza Pérez es hijo de David Garza y Mónica Perez de Garza y es bisnieto de Eugenio Garza Sada, empresario y filántropo, hijo del fundador de la cervecería Cuahtémoc. También fue fundador del Tecnológico de Monterrey y Presidente del Grupo VISA.
Aunque se saben muy pocos detalles de la joven pareja, todo parece indicar, que fue la equitación, deporte que practican ambos, la que unió sus caminos. El joven vive desde los 15 años en Estados Unidos donde ha practicado este deporte donde ha logrado importantes logros, entre ellos, la medalla de oro en el Campeonato Juvenil Norteamericano Ecuestre.
Actualmete el mexicano vive en Florida donde su nombre suena con fuerza en los circuitos de equitación, donde con su caballo Bariano ha cosechado grandes éxitos en este deporte. Por su parte, Eve, la tercera hija del creador del iPhone también ha estado involucrada desde muy pequeña con la equitación, de hecho fue gracias a esta pasión que eligió estudiar el bachillerato en la Academia Upper Echelon, un instituto on line, que le permitió compaginar sus estudios con esta actividad.
En el Instagram de Eve no hay más que imágenes de sus competencias y las imágenes más tiernas de su historia de amor con el mexicano, quien lo mismo se ha convertido en el más caballero a la hora de protagonizar una cita o el mejor compañero a la hora de una aventura como bucear, tal como ha documentado la rubia en su Instagram.