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Genética, malos hábitos alimenticios, estrés o el uso incorrecto de productos cosméticos están entre los responsables de un cutis graso. Un tipo de piel en el que las glándulas sebáceas están sobre estimuladas, lo que hace más propensa la aparición de barros, espinillas y acné, pues los poros se dilatan y se convierten en depósitos de grasa.
En casa puedes implementar una rutina que te ayude a combatir esta problemática, uno de los productos más populares y eficaces son los geles limpiadores. Su uso por la mañana y por la tarde te ayudarán a eliminar toxinas, restos de maquillaje y limpiar las impurezas que se acumulan durante el día. Para ello utiliza productos no comedogénicos.
Reduce la grasa de la cara con estas sencilllas rutinas caseras:
© GettyImages- Exfoliación: Lo ideal es realizarlo una vez por semana para eliminar las células muertas de la piel.
- Hidratación: Aunque tu piel sea grasa, eso no quiere decir que no necesite estar hidratada. Para ello son recomendables las cremas de tipo gel que además contengan ácido hialurónico y/o vitamina C.
- Alimentación: Como en todos los aspectos de nuestra vida, una alimentación adecuada tiene un impacto positivo para nuestra piel. Evita el consumo de grasas saturadas, azúcares y harinas refinadas y aumenta el consumo de alimentos de origen vegetal.
© GettyImages- Malos hábitos: el consumo de tabaco y alcohol también tiene repercusiones en nuestra piel, como la deshidratación. Elimina estos productos de tu rutina y notarás la diferencia.
- Protector UV: el uso de fotoprotectores está indicado sin importar el lugar o la época del año. Elige uno de base ligera, que además de protegerte del daño solar, te ayudará a evitar hiperpigmentaciones.
Los NO definitivos si tu piel es grasa
© GettyImages- Por ningún motivo excedas el uso de crema hidratante
- Más de dos exfoliaciones por semana lejos de ayudarte harán que tu piel, como mecanismo de defensa segregue más grasa.
- No toques, ni exprimas barros ni espinillas porque al manipularlos la piel es más vulnerable a sufrir una infección o presentar manchas residuales.
- Dejar de hidratar la piel es uno de los errores más comunes con los que creemos que estamos reduciendo la producción de grasa, pero no es así. Para lucir un cutis terso elige productos elaborados específicamente para tu tipo de piel.
