El estado de nuestras uñas dice mucho de nosotras. Las uñas rotas son uno de los males más comunes, pues es normal que con las actividades del día tengamos algún accidente y terminen partiéndose. ¡Tranquila! Para resolver este problema no es necesario invertir demasiados recursos, pues con unos simples tips y cambios en tu rutina, lograrás evitar que esto siga siendo una preocupación.
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Con estos cinco consejos podrás mantener tus uñas fuertes y con buena forma, para presumir de unas manos 'perfectas', aunque debes recordar que además de estos trucos la disciplina y constancia serán también necesarios para lograr tu objetivo. ¿Lista para comenzar?
Este es uno de los males más comunes y de los más graves si lo que buscas es fortalecer tus uñas. El constante contacto de estas con tu boca y por ende con la saliva no es buena, pues la humedad y las bacterias causan debilidad. Debes evitarlo y si te es muy complicado, puedes acudir a esmaltes con mal sabor diseñados con esta finalidad, que te facilitarán la tarea.
Las pinturas de uñas son una muy buena manera de proteger a tu uña, pues al poner dos o más capas de esmalte estas creando una barrera protectora que te ayudará a cubrir esta zona de los agentes externos. Lo bueno es que con la variedad de colores que existe, seguro encontrarás uno que se adapta a tu estilo y rutina. Lo importante es protegerlas.
Así como cuidas la piel de tu cuerpo y tu rostro, debes poner atención a tus uñas. Está comprobado que el uso de cremas, líquidos y aceites ayudan a hidratar, nutrir y fortalecer esta zona, haciendo que el crecimiento sea exitoso.
Procura convertir este paso en parte de tu rutina, y al menos una vez a la semana dedicar tiempo a tus uñas con productos específicos para evitar que se rompan, pues el fortalecimiento de la base y las cutículas garantizan mejores resultados. Puedes recurrir incluso a mascarillas caseras o aceites naturales como el de coco y almendras para lograrlo.
Toma ciertas precauciones a la hora de hacer tareas del hogar, como lavar los platos, limpiar pisos o cualquier actividad en la que tengas mucho contacto con agua y productos químicos de limpieza; lo mejor que puedes hacer es convertir los guantes en tus mejores amigos, ya que el contacto directo de tus uñas con estos elementos hacen que se debiliten y se partan con más frecuencia.
Los productos endurecedores y protectores son necesarios si lo que quieres es llegar a tener unas uñas firmes y fuertes. Lo ideal es que tengas uno de estos en tu neceser y que lo apliques antes del esmalte para que el contacto directo genere mejores resultados; eso si, se recomienda que lo acompañes con un esmalte para asegurar una mejor protección para tus uñas.
Son pequeños cambios, que puedes comenzar a aplicar en tu rutina de cuidado, para poder observar en pocos días los resultados.
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