8 falsos mitos que querrás saber si estás haciendo dieta

Esta creencia de que cualquier plan dietético se adapta a ti, es uno de los principales errores que se comenten. Lo primordial, como lo aconseja la Organización Mundial de la Salud (OMS), es que un especialista nutricional te aconseje antes de empezar cualquier régimen alimenticio.

¿Por qué? La nutricionista Elisa Escorihuela aseguró a Telva, que la dieta “debe adaptarse a tu estilo de vida, a tus necesidades, a tu edad, a tu morfología”, después de todo, cada quien es diferente.

Al pensar en la palabra dieta, inevitablemente se asume que los principales enemigos son los carbohidratos y por ello se desechan. ¡Es otra falsa creencia! Estos alimentos son fundamentales, si se saben consumir adecuadamente y no en exceso. Sus componentes, como azúcares, almidón y fibra, son imprescindibles en una dieta balanceada.

"Nuestro cuerpo necesita los carbohidratos para obtener energía, y particularmente para que el cerebro y los músculos funcionen. El Departamento de Salud del Reino Unido recomienda que al menos la mitad de la energía que incluimos en nuestra dieta provenga de carbohidratos almidonados", explica a la BBC Mundo, Lucy Chambers, especialista en alimentación de la Fundación Británica de Nutrición.

Incluso los carbohidratos los podemos comer de noche, solo que debemos reducir las cantidades.

No hay nada más contraproducente en nuestro plan alimenticio que querer saltarse alguna comida, lo que en realidad se convertiría en un muy mal hábito. ¿Sus consecuencias? Sentirás más hambre, por lo que de seguro querrás comer en exceso en la siguiente comida, consiguiendo precisamente lo contrario a lo que quieres, que es perder peso.

La constante hidratación, desde cualquier punto de vista, es fundamental. Pero cuando se trata de beber agua, muchas creen que aumentando su consumo ayudará perder libras más rápidamente, y no es así –pero sí puede evitar que confundas las sensación de sed con la de hambre–. También hay otras creencias que aseguran que beber el vital líquido entre comidas engorda, y también es falso.

El agua no aporta calorías, y según un informe de la Confederación de Consumidores y Usuarios, que reseña ABC, el beber agua antes de las comidas aumenta la sensación de saciedad, por lo que es recomendable consumir la cantidad que quieras si estás haciendo dieta.

No cabe duda que los productos integrales pueden ayudar aumentar la sensación de saciedad; pero atención con esto, no pienses que solo por incluirlos en tu régimen, perderás peso rápidamente. “Podremos adelgazar si reducimos las cantidades, pero nunca comiendo un tipo de alimento determinado”, asegura a la ABC, la nutricionista Gretel Cabrera.

Seguro has escuchado decir que el té verde, el repollo o la toronja, serán tus aliados perfectos para quemar esa grasa en un instante, pero esta creencia es errónea, porque no hay ningún tipo de alimento que tenga propiedades especiales para eliminar la grasa de nuestro cuerpo.

Este mito está muy relacionado con el de saltarse las comidas. Pero lo ideal es aceptar que en toda dieta se debe comer de forma balanceada, es decir, las cinco comidas (dos de ellas meriendas) recomendadas por los especialistas.

Así que no hay ningún crimen en querer ‘picar entre comidas’ si estás a dieta, siempre y cuando sean meriendas ligeras, adecuadas, como algún vegetal, una fruta o yogurt bajo en grasa, porque son ideales para controlar el apetito.

No podemos dejar de mencionar un mito siempre presente: comer de noche engorda. Éste tampoco determina el que tengas libras de más, porque en realidad son las calorías que comes. Según recalca BBC Mundo, si se consumen más de las calorías que tu cuerpo necesita, lógicamente ganarás peso, no importa si esto ocurre en la mañana, en la tarde o en la noche.

“En esto coinciden tanto el Centro de Salud de la Universidad de West Virginia, en Estados Unidos, como la publicación médica estadounidense WebMD, que añade que no existe ninguna prueba de que cuando se come tarde en la noche, se engorda”, acota el medio.