Recorremos los pueblos riojanos que han servido de escenario a la adaptación cinematográfica del libro de Sara Mesa, que el sábado compite con 7 nominaciones a los Premios GoyaPor Eva de la Parra
Paseos en bici, hayedos y robledales llenos de color, pueblos encantadores, mantas y echarpes de 'mohair' o 'cashmere', vino y unas de las mejores croquetas de España para tu próximo fin de semanaPor ¡HOLA!
Una cata de los perfumes más exclusivos del mundo, gastronomía tradicional con dos estrellas Michelin, un spa cinco estrellas en un hotel de autor o las elaboraciones heladas del mejor repostero de España son algunas de las paradas más sibaritas en esta rúa histórica de la capital de La Rioja.
Unos llegan atraídos por la montaña, otros por su bien conservada arquitectura serrana, muchos por la gastronomía y algunos más por hacerse con una de las mantas artesanales que fabrican aquí y luego se venden en Loewe. Con tantos reclamos, no hay quien haga sombra a este pequeño pueblo riojano.Por ¡HOLA!
El rastro de los dinosaurios despierta la imaginación y hace soñar a niños y mayores. Mucho más las tierras del sur riojano, donde se han descubierto más de 1400 huellas de dinosaurios.Por Javier Carrión
En el cielo, docenas de buitres. En el suelo, huellas de dinosaurios. A los lados, dos laderas casi verticales de 700 metros. Y alrededor, los pueblos del Camero Viejo, solitarios, de pura piedra y tradición trashumante. Buen lugar para pasear esta primavera admirando el paisaje. O para ir saltando con un neopreno de poza en poza.Por Andrés Campos
Flotar en el aire a bordo de un aerostato, mientras el sol asoma por la sierra y una alfombra de viñas junto al Ebro se despliega bajo los pies, es la manera ideal de emprender un nuevo día de otoño. Pero también podemos hacer una bonita caminata por la naturaleza, visitar resquicios arqueológicos, monumentos románicos y, por supuesto, entregarnos al vino, el alma de la comarca conocida como La Rioja Alta.Por Noelia Ferreiro
Murallas, encantadoras plazas, palacios señoriales y el trajín de peregrinos que desfilan por la calle Mayor, cruzan su largo puente sobre el río Oja y siguen caminando hacia Santiago marcan el día a día de esta monumental localidad en la que da gusto hacer parada.Por ESPERANZA MORENO