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Una de las cosas que peor llevo del invierno, además del frío en sí, es la condensación que se genera en las ventanas. Puede ser con más o menos intensidad, pero, generalmente, algo aparece siempre. De hecho, en mi antigua casa era tan frecuente, que se llegó a generar moho alrededor de ellas. Y ahí es cuando decidí ponerme manos a la obra para que no volviese a pasar.
Esto se produce por la diferencia de temperatura entre el exterior, que en invierno suele ser muy frío, y el interior cálido. El vidrio se empaña, la humedad aparece, no solo en el vidrio, sino también en los marcos de la ventana y, de ahí, pasa a la pared.
Pregunté mucho a expertos en la materia y me dijeron que, muchas veces, no solo tiene que ver con si las ventanas aíslan bien o no, sino que los materiales con los que están hechas las viviendas, su orientación y la entrada de más o menos ráfagas de viento influyen. Así que, por mucho que yo cambiase las ventanas, podría no llegar a desaparecer. Sin querer, recordé los meses que estuve viviendo en Inglaterra y el truco que utilizaban allí para conseguir que las ventanas quedasen libres de condensación. Y te lo cuento a continuación. Por si ya estás tan desesperada como estuve yo.
7 productos para evitar la condensación en las ventanas
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EN FORMATO MINI PARA CUALQUIER ESTANCIA: Paquetes Gel de Sílice wisedry 50 Gramos
El gran secreto para reducir la humedad en casa es utilizar un material altamente absorbente en aquellos espacios en los que más se acumule. Y, uno de ellos, es el gel de sílice. Lo conocerás porque forma parte de las bolsitas desecantes que muchas veces ves que incluyen los productos. Y puedes usarla con este fin.
Así, un truco muy sencillo es hacerte con bolsitas como estas de wisedry que contiene geles de sílice. Tienen un color naranja para que, cuando dejen de tener efecto, se tornen verdes y sepas que tienes que reponerlas.
Puedes utilizar más o menos cantidad dependiendo de lo grande que sea tu espacio o si, por ejemplo, solo necesitas eliminar la humedad de un armario o espacio pequeño.
Tienen una alta absorción consiguiendo hasta obtener un 35% de su peso con la humedad que recogen. Es seguro para utilizar en cualquier lugar, aunque entre en contacto con otros productos.
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EL MEJOR PARA ESPACIOS GRANDES: Aparato Deshumidificador Premium de HUMYDRY
Otro material que te puede ayudar a reducir la humedad de manera rápida y eficaz es el cloruro de calcio, que contiene este pequeño aparato deshumidificador de HUMYDRY.
Es un producto que evita la humedad por condensación, haciendo que no aparezca moho ni olor a humedad. Está pensado para espacios de hasta 35 m2, tanto si están bien ventilados como si no.
Funciona de una manera sencilla, con una bolsa de cloruro de calcio en formato granulado que se activa automáticamente cuando hay exceso de humedad. Una vez deje de ser eficaz, es recargable. Es fácil de sustituir.
Gracias a esa capacidad de absorción, mantiene los niveles óptimos de humedad en torno a un 40% a 60%, sin llegar a resecar demasiado el ambiente. Cuenta con un sistema de seguridad para evitar derrames o fugas del líquido que se va generando.
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EL MEJOR DISEÑO PARA EL BAÑO: Rubson AERO 360º Baño
Para espacios más pequeños, como puede ser el baño, que suele generar bastante humedad (sobre todo, si no tiene ventilación), tienes este modelo AERO 360º de Rubson. Además, es capaz de neutralizar malos olores.
Funciona con una tableta con cristales activos que absorben la humedad y que, al igual que en el caso anterior, lo hace convirtiéndose en líquido. Por ello, también cuenta con un sistema de seguridad para evitar derrames.
Es fácil de usar y está preparado para ser eficaz en espacios de unos 10 m². Para cambiar la tableta, tienes que hacerlo a través de su mecanismo de apertura por presión, vaciando previamente el contenido por su boquilla. Tiene un indicador que te avisa.
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PARA TODA LA CASA: ANSIO Deshumidificador 500ml
El deshumidificador interior de ANSIO funciona con cristales hidrófilos que lo que hacen es retener la humedad del aire, ayudándote a combatir la condensación y los posibles alérgenos del aire.
Es fácil de usar y apto para todo tipo de espacios, sean más o menos grandes. Y no desesperes si ves que no funciona, porque la primera gota líquida aparece, como pronto tras una primera semana de utilización.
Consigue absorber hasta tres veces su peso en agua y te dura entre un mes o mes y medio. En ese momento, debes reemplazarlo por otro.
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SI BUSCAS UN DISEÑO MÁS ESTÉTICO: Rubson AERO 360º Deshumidificador Recargable
Otro deshumidificador que puedes utilizar si lo vas a poner en algún sitio visible y te importa bastante la estética es este modelo AERO 360º de Rubson.
Funciona de manera sencilla, como todos los anteriores, con un rango de acción de unos 22 m². Tiene un diseño que permite que el aire circule en 360º y, por lo tanto, es bastante más eficaz.
Está formado por tabletas con cristales activos que absorben tanto la humedad como los malos olores. Cada recambio tiene una vida útil de unos tres meses.
Se vacía a través de una cánula, cuando el indicador de nivel así te lo pide y, después, tan solo tienes que reemplazar la tableta, que es de 450 gramos, algo más pequeños que las anteriores.
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PARA CREAR UN SISTEMA CASERO: Aquafloow Bolsa Recambio Absorbe Humedad
Otra opción que también he visto mucho es hacer un deshumidificador casero, para lo que vas a necesitar bolsas como estas de Aquafloow.
Son bolsitas de vellón rellenas con 280 gramos de granulado que, en conjunto, tienen una acción deshumidificadora de tres meses en espacios de 20 m2. Su efecto es inmediato.
Puedes meterlas todas en un calcetín que ya no te pongas o en una bolsita de tela pequeña, cerrarlo con una goma elástica y colocarlo en la zona donde más humedad se genere. Se puede utilizar, incluso, en el interior de los armarios sin problema.
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CON AROMA: Pack 5 Deshumidificador Antihumedad MoistRid
Por último, un sistema muy parecido a los anteriores pero, a diferencia de ellos, con aroma a jazmín.
Con un gran poder de absorción, se puede colocar en cualquier espacio, reduciendo así la humedad por condensación. Dependiendo de su amplitud, te durará entre tres y cinco semanas.
