Llevo haciendo deporte mucho tiempo, generalmente pilates, que combinaba con ejercicios de cardio y fuerza, e incluso he llegado a crear mi pequeño mini gimnasio en casa. Sin embargo, echaba en falta las posibilidades que me ofrece un gimnasio más grande y equipado con máquinas, especialmente para tonificar y ganar masa muscular. Así que a principios de verano decidí apuntarme.
No tardé ni una semana en darme cuenta de que iba a necesitar hacer alguna compra. Así fue como creé mi kit de gimnasio, el cual hoy quiero compartir contigo (junto con algunos productos que aún tengo en mi lista de pendientes), por si tú también estás pensando darle una nueva oportunidad al deporte.
Y, aunque no todo lo que verás más abajo es imprescindible, ya que con una toalla y una botella de agua tienes más que suficiente, sí son accesorios que te van a ayudar a perfeccionar tu técnica y hacer que tu experiencia sea mucho más agradable.
¿Preparada? Toma nota.
Mis 9 imprescindibles para ir al gimnasio
Una mochila para el gimnasio
Lo primero que vas a necesitar es una mochila o bolsa donde llevar todo lo necesario para tus sesiones de entrenamiento. Especialmente si tus horarios te obligan a ir directa desde el trabajo y no te da tiempo de pasar por casa y vestirte allí. En un principio, yo utilicé una bolsa de tela, pero no me resultaba cómoda porque todo acababa revuelto.
Ahí fue cuando fiché esta bolsa para el gimnasio de Under Armour, que me enamoró por su diseño rosa y me convenció aún más después de leer sus características.
¿Sus puntos fuertes? Está fabricada con una tecnología que mejora la resistencia del tejido y le permite repeler el agua, así como paneles resistentes a la abrasión y refuerzos de espuma que aumentan su durabilidad. Por otra parte, cuenta con varios bolsillos estratégicamente pensados para guardar tus imprescindibles de gimnasio (un compartimento grande para la ropa con espacio para las zapatillas, un bolsillo interior y otro delantero con cremallera para guardar objetos pequeños como la cartera, el móvil o los auriculares, y un bolsillo de malla en el lateral donde colocar tu botella de agua).
Y, para rematar, cuenta con un asa extraíble larga para llevarla cruzada.
Unos guantes fitness para las pesas
Uno de los principales retos a los que me enfrenté cuando empecé el gimnasio, además de aprender a levantar peso, fue el dolor y las molestias en las manos, que muchas veces me limitaba más que la propia fuerza de mis músculos. Así que, en cuanto noté que empezaban a aparecerme durezas y callos, me hice con estos guantes de fitness.
Los escogí por sus buenas valoraciones y porque incorporan muñequeras elásticas que me permiten proteger mis muñecas.
Y, después de utilizarlos, tengo que reconocer que, aunque tienes que acostumbrarte, estoy encantada con ellos.
Un peine mini para llevar en el neceser
Desde que probé el cepillo de esqueleto de Beter, se ha convertido en mi favorito indiscutible por lo suavemente que desenreda y peina. Por eso, a la hora de elegir un cepillo mini para llevar en mi neceser del gimnasio, no lo dudé a la hora de escoger el cepillo detangling On-the-Go de la marca.
Un modelo compacto, equipado con cerdas flexibles de plástico reciclado que desenredan muy bien y evitan los tirones.
Cintas de pelo para entrenar más cómoda
Una de las cosas que más me molestan cuando llevo coleta son los pelitos cortos que surgen del nacimiento de mi pelo, cuya cantidad ha aumentado desde que tomo Olistic. Es por eso que decidí hacerme con este kit de cintas para el pelo, especialmente diseñadas para absorber el sudor, pero que yo utilizo para controlar esos pelitos. Y tengo que reconocer que desde que los uso entreno mucho más cómoda.
El pack, que destaca como el más vendido de Amazon, incluye un total de 6 piezas elásticas de poliéster, equipadas con una tira antideslizante en su interior para fijarla mejor al cabello.
Un diario de entrenamiento
Una de las cosas que he aprendido al empezar a ir al gimnasio es que, para ganar masa muscular, es necesario ir aumentando progresivamente la intensidad del entrenamiento. Esto puede hacerse bien aumentando los pesos, o bien aumentando el número de repeticiones. Y, como mi memoria no es realmente buena y recordar tu trayectoria con cada ejercicio es prácticamente imposible, decidí comprarme este diario de entrenamiento.
En él puedes apuntar el número de repeticiones y el peso que has usado en cada ejercicio, así como tus sensaciones y tu estado físico en cada sesión. Una forma muy útil de ir progresando y mejorando.
Una botella de agua para hidratarte
Aunque yo utilizo mi botella de agua reutilizable de Ecoalf, muy ligera y cómoda, echo en falta un modelo que incorpore un cierre automático, para no tener que estar desenroscando el tapón cada vez que la uso.
En Amazon he localizado esta botella, que destaca como una de las mejor valoradas y más recomendadas, e incorpora un tapón automático a prueba de fugas. Aunque también podrás desenroscar dicho tapón cuando lo necesites. De hecho, este detalle es muy cómodo para limpiarla e introducir hielos, por ejemplo.
Está fabricada en acero inoxidable y es capaz de mantener el calor hasta 12 horas y el frío hasta un día entero.
Unos leggings cortos de Lululemon
Como llevo varios años entrenando en casa, no prestaba demasiada atención a la ropa deportiva que usaba más allá de lo cómoda que me sintiera con ella. Sin embargo, al empezar a ir al gimnasio he sentido la necesidad de renovar mi armario de deporte, ya que no contaba nada más que con un conjunto completo.
Y, aunque en invierno me pasaré a los leggings largos, lo primero que he hecho durante el verano ha sido comprarme otras mallas cortas como estas, de Lululemon, que son mis grandes favoritas desde hace años.
Un modelo fabricado en un tejido técnico elástico que se adapta al cuerpo sin oprimir en absoluto, se seca rápidamente y resulta comodísimo.
Unas zapatillas barefoot de Saguaro
Aunque ahora mismo utilizo unas zapatillas de deporte que tenía en casa desde hace años, llevo un tiempo planteándome hacerme con unas zapatillas barefoot. Concretamente, este modelo de Saguaro está el primero en mi lista, tanto por las buenas valoraciones que tiene como por lo mucho que me las han recomendado.
Una opción que me parece muy interesante para usar en el gimnasio, ya que permite que el pie tenga más libertad de movimiento, lo que mejora el apoyo, la postura y, en consecuencia, la técnica a la hora de levantar peso.
Una toalla de microfibra de Decathlon
Un accesorio que realmente no puede faltar en tu mochila es la toalla, obligatoria en cualquier gimnasio. Y, aunque en este sentido la elección final dependerá por completo de tus gustos personales, en mi caso me he decantado por las clásicas toallas de microfibra de Decathlon.
Un modelo que, además de absorber mucho mejor el sudor, no pesa ni ocupa apenas espacio en mi bolso. Un detalle que valorarás mucho cuando, como yo, empieces a añadir accesorios a tu día a día en el gimnasio.