Estos son los muebles 'top ventas' de IKEA que tu salón necesita

En casa de mis padres, todos los muebles son a medida. Por lo que, la primera vez que tuve que amueblar mi casa, con poco dinero, no sabía cómo iba a quedar algo que tuviese unas dimensiones predeterminadas. Encajar una librería en el salón fue una de las cosas que más me preocupaba. Al final, me decidí por unas BILLY.

Tienen nombre propio y todo el mundo las conoce. No es para menos, porque con diferentes medidas, alturas, etc. puedes crear una librería preciosa que le deja todo el protagonismo al contenido. Y ésto es lo que más me gusta de ellas.

Son sencillas y limpias, nada gruesas, y puedes ir uniendo una a otra, creando una especie de librería modular. En cuatro colores diferentes (¡ojo a la elegante negro-azul!), tiene un diseño atemporal y puedes ir añadiéndole ciertos accesorios que la embellecen, como unas puertas (para evitar que el polvo llegue al interior) o iluminación superior.

Aunque no con la misma fama que la serie anterior, sí que es cierto que desde hace un tiempo habrás escuchado la línea de BESTÅ, cada vez con más productos y más aficionados.

Aunque el más vendido de estos muebles de almacenaje es el blanco, existen multiples versiones que mezclan, por ejemplo, el gris con el blanco o el beige, etc. 

Se trata de un mueble bajo con patas y tres módulos, dos de ellos son puertas y uno tiene cajones, que hace la función de aparador. Sus líneas son limpias y atemporales, dándote gran versatilidad. Vale también para un hall de entrada o para la zona de comedor.

Las bisagras son regulables, con lo que puedes ajustar la puerta tanto horizontal como verticalmente. Los cajones llevan un mecanismo de apertura a presión, así que son sencillos de abrir con un toque y no tiene tiradores a la vista, con lo que combina con todo. Las baldas son también regulables, para adaptarse a tus necesidades.

Otro de los puntos más importantes dentro de un salón, al menos para mí, es el sofá. Creo que si fallas con él, esta estancia se quedará incompleta. De hecho, es algo que vas a utilizar a diario y si no eliges a conciencia, vas a recordártelo siempre.

Entre los más vendidos, se encuentra este sofá-cama GRÄLVIKEN, de tres plazas en gris. Yo, para aquella primera casa, compré uno parecido y valoro mucho: por un lado, que la superficie sea lo más firme y lisa posible, para que puedas tumbarte y estar cómoda y, por otro, que la cama sea fácil de montar y desmontar. Y, en este caso, estas características se cumplen.

Además, dispone de un práctico sistema de almacenaje para la ropa de cama o, como yo, para todas las fundas de sofá y de cojines que vas coleccionando. Los cojines tienen un relleno de espuma de poliuretano y guata de fibra de poliéster.

La prima hermana de la serie BILLY es, sin duda, las KALLAX. Se diferencian de las primeras en que los espacios para almacenar son en formato cuadrado y es una estantería más gruesa y sin tablero posterior (queda al aire). Y, por ello, te permite colocarlas en horizontal o vertical. A mí, particularmente, me gusta más de la primera forma.

Son totalmente personalizables, tanto que puedes crear una como ésta que ya viene montada, con los espacios de arriba en abierto y los inferiores con prácticos cajones. Estos módulos los vas comprando tú y ubicándolos al gusto. Y encajan bien. De hecho, los estantes se alinean con la estructura, dándote la sensación de venir ya así de fábrica.

Además de un sofá, si tienes espacio en tu salón aunque no lo suficiente como para poner un segundo sofá, puedes utilizar las butacas o sillones. Uno de los más vendidos y de líneas más ligeras, para no recargar demasiado, son los POÄNG.

Son cómodos, te permiten adoptar una posición semireclinada y puedes elegir entre una decena de texturas y colores. 

La estructura es de madera doblada encolada, lo que hace que el sillón tenga un sutil efecto de mecedora. El respaldo es bastante alto, con lo que tu cuello puede descansar (hay algunos sofás que, por ejemplo, cojean en este specto) y cuenta con un reposapiés que puedes comprar como accesorio.

De entre las mesas de salón que tiene IKEA, una de las más vendidas es esta mesita auxiliar en negro GLADOM. Es fantástica para ponerla cerca de un sofá (por su altura) y te sirve para poner todo lo que sueles llevarte para tumbarte en él, como una taza con tu infusión favorita o tu última lectura. De esta forma, no correrás el peligro de ensuciarlo.

De hecho, su bandeja es extraíble, para que puedas trasladarla cómodamente, al igual que su estructura, muy ligera. Además, tiene un precio tan bajo que puedes hacerte con varias para que cada uno tenga la suya.

Un reposapiés para potenciar tu descanso o, como en mi caso, con función puff para invitados. En casa actual, no tengo todo el espacio que me gustaría en el salón y me faltaban plazas de asiento, por lo que opté por hacerme con un reposapiés como el STRANDMON para ofrecérselo a mis invitados y, cuando no están, que me sirva para apoyar mis libros y revistas.

Es uno de los muebles más vendidos de IKEA, con un diseño bastante clásico para lo que suele ser la marca, con patas altas y con una múltiples colores entre los que elegir.

Un mueble para tu televisión muy funcional y con líneas contemporáneas. Si es ésto lo que buscas, sin duda, tienes que elegir el más vendido de BESTÅ. Con mucho espacio de almacenaje, lo que más me gusta es que te permite mantener los cables bien organizados y ocultos en la parte trasera.

Se puede montar en la pared, viene preparado para eso, con lo que no te estorba para pasar la aspiradora o limpiar, pero también puedes sumarle unas patas. Las baldas que tiene en su interior son regulables, adaptando de nuevo el espacio a tus necesidades.

Tienes dos opciones de cierre: la más suave, para cerrar las puertas silenciosamente, y la apertura a presión, que te permite abrirla con un ligero golpe.