Cepillos eléctricos para niños, la clave para una buena higiene bucal temprana

No es hasta los 3 años de edad cuando los niños pueden comenzar a utilizar un cepillo eléctrico recargable. Acostumbrados al cepillo manual (deberían estarlo), quizás hacerse con un tipo de cepillo nuevo pueda costarles. Sin embargo, me ha gustado mucho este cepillo Braun Oral-B Pro Kids 1 que, además, está avalado por dentistas.

Está específicamente diseñado para esta edad, con un cabezal redondo bastante pequeño, lo que les permite acceder a las zonas más difíciles y, además, cuenta con una tecnología pensada para ayudarles en el cepillado. Al final, les parece hasta divertido.

Las cerdas son extra suaves para proteger tanto el esmalte como las encías. Cuenta con dos modos de cepillado, con uno de ellos más sensible para garantizar un trato delicado de su esmalte. Incluye pegatinas temáticas de Disney para personalizar el mango.

La gama Oral-B Kids tiene opciones adaptadas a diferentes edades, por lo que cuando tu hijo cumpla 6 años, ya puedes pasar a su cepillo eléctrico infantil Braun Oral-B Pro Junior. En esta edad, ya es importante conseguir una limpieza interdental efectiva y comenzamos a usar una pasta dental con más cantidad de flúor. Se trata de prevenir las posibles enfermedades en las encías y evitar la formación de caries, cada vez, más habitual.

Para ello, este cepillo infantil ya cuenta con un sensor de presión 360 º, un temporizador de dos minutos y dos modos de cepillado, como en el modelo anterior. Tiene un cabezal extra suave y, de nuevo, cuenta con la aplicación Disney Magic Timer que, en este caso, no es tan necesaria como en el caso de los niños pequeños, pero sigue siendo divertida.

Pensado para niños a partir de los 3 años, el cepillo de dientes eléctrico de Seago cuenta con un flash LED colorido para resolver lo que consideran los problemas básicos del cepillado en niños. Los LED blancos, por ejemplo, ayudan a observar los dientes profundamente en sus bocas.

Cuenta con una tecnología de 24.000 vibraciones por minuto, un recordatorio de tiempo cada 30 segundos de que debes cambiar de zona y un temporizador integrado de 2 minutos para finalizar la limpieza. De esta forma, los niños tienen una guía para saber cómo lavarse los dientes y cuánto tiempo. Trae tres cabezales de cepillo reemplazables con filamentos extrasuaves para las delicadas encías de los niños.

El cepillo de dientes eléctrico Oral-B iO My Way ha sido diseñado específicamente para niños a partir de 10 años, es decir, para los adolescentes. Sin embargo, yo también podría quedarme con él. Su tecnología les permite tener una limpieza podemos decir 'profesional' si lo utilizan bien.

Cuenta con un cabezal redondo, inspirado precisamente en las herramientas que utilizan los dentistas, para una limpieza eficiente, pero sin dejar de ser un cabezal de aplicación suave. Ofrece cuatro modos de cepillado inteligente: limpieza diaria, blanqueamiento, sensible y extrasensible. Además, cuenta con un sensor de presión que indica si estás cepillando demasiado fuerte o demasiado suave.

Por último, un cepillo de dientes eléctrico diseñado para los más pequeños de todos, siendo completamente seguro para ellos, el cepillo de dientes sónico FOREO ISSA Baby. Está pensado para sus delicadas encías y unos afilados dientes de leche. Por ello, no tiene un cabezal de limpieza desmontable y está fabricado sin ftalatos o BPA. La silicona utilizada es ultra suave de grado médico, 100% resistente al agua y de secado rápido, nada porosa.

Cuenta con cuatro modos, con un modo masaje para las encías, que elimina los restos de comida y suaviza los dolores de la dentición, un modo cepillado más clásico. Tiene una carita sonriente para confirmar que los dientes se han cepillado durante dos minutos y una carita triste cuando llevas ya 12 horas sin pasar por él.