Diez perfumes de lujo perfectos para regalar

Si eres amante de las fragancias de lujo, probablemente hayas visto el icónico frasco que contiene J'Adore Dior, una de las fragancias más emblemáticas de la firma francesa. Floral y femenino, este perfume combina el dulce aroma de la flor oriental ylang-ylang con la esencia de rosa damascena de Turquía y la delicadeza del jazmín grandiflorum de Grasse y el jazmín sambac de la India.

Con acordes afrutados y un aroma voluptuoso, J'Adore es -según su propio perfumista- "un perfume extraordinario que es capaz de seducir con facilidad manteniendo una impronta original". Una composición "carnal, sin ser abrumadora" que hará del regalo perfecto para estas fiestas.

Como su propio nombre lo indica, este perfume de Prada nos recuerda al aroma de un delicioso caramelo. Y es que su corazón con esencia de almizcle y acordes atalcados está envuelto por una nota de salida con olor a caramelo, que le da ese particular y delicioso aroma dulce.

Además, en su base cuenta con acordes de benjuí y vainilla, esencias que ofrecen a esta mezcla un tono ligeramente terroso y especiado, y que la distinguen del resto de perfumes de la familia gourmand. Femenina y cautivadora, es la fragancia perfecta para enamorar a esa persona especial en estas Navidades. 

Inspirados en la ciudad de Madrid, los perfumistas de Loewe decidieron rendirle homenaje a uno de sus más grandes iconos: la fuente de Cibeles. Y, en concreto, a la diosa griega que la corona. Y es que, así como esta deidad era la patrona de la tierra, la agricultura y la fecundidad, 'La bella cibeles' replica estos elementos a través de un aroma floral que mezcla tonos del iris y la rosa. Lleva un delicado fondo con acordes de almizcle y vainilla, y ligeras notas de salida de bergamota y limón. Con una combinación de aromas florales con ligeros toques cítricos y especiados, este perfume representa la fuerza, pasión y feminidad que encarna uno de los grandes iconos de la capital. 

El terciopelo siempre ha sido una de las telas favoritas de Tom Ford, y es que para el diseñador americano una mujer que usa esta tela "no es una flor silvestre, es una flor urbana, una flor de invernadero, una orquídea". Así es como nace 'Velvet Orchid', una fragancia lujosa, sofisticada y mística que mezcla el jazmín, el aceite de rosa turca y el aroma de la orquídea Cattleya para crear un perfume aterciopelado exquisito.

En su centro tiene acordes de orquídea negra y azahar. Cuenta con notas de salida de bergamota italiana, ron y miel, y hacia el final de la fragancia se puede detectar el exquisito olor del sándalo y la tintura de vainilla. Con este contraste entre lo floral y lo dulce, este es el perfume ideal para regalarle a esa mujer elegante y única en tu vida. 

No se puede hablar de lujo sin incluir a esta fragancia, y es que desde su creación en 1921, el Chanel Nº5 no solo se ha consagrado como uno de los perfumes más emblemáticos de la marca, sino que se ha convertido en un verdadero objeto de deseo entre mujeres de todas las edades, gustos y procedencias. 

Compuesto por un bouquet floral, en su centro mezcla los aromas de la rosa de mayo y el jazmín, que están rematados por un delicioso aroma a vainilla que deja una estela de sensualidad. Elegante y atemporal, esta es la fragancia que ha conquistado el corazón de grandes divas de las artes, como Marilyn Monroe, y que puede hacerte protagonista de estas fiestas desde la primera atomización.

Usando como nombre la feminización italiana de la palabra rubí, 'Rubinia' es un perfume que -al igual que la piedra preciosa- simboliza la audacia y el amor apasionado. Una fragancia sensual que irradia una feminidad fuerte con su corazón amaderado de sándalo y madera de Copaiba, y sus notas de salida de mandarina de Sicilia.

Una combinación de acordes terrosos y cítricos que culminan en una nota de fondo especiada y dulce, aportada por el absoluto de Haba Tonka. Elegante y sofisticada, es la fragancia perfecta para regalar a esa mujer única en tu vida. 

Usando como base el aroma y la vitalidad de unas bonitas peonias en floración, este perfume unisex de Jo Malone es una de las apuestas florales más codiciadas del mercado. Su aroma suntuoso y seductor se entremezcla con la delicadeza de los acordes del jazmín, la rosa y el clavel, y se acompaña de una sutil nota herbal y un acento de miel. Juega con la jugosa fragancia de la manzana roja, que le da un toque afrutado e inocente, y en su base usa el ante para complementar la opulencia floral, así como para dar textura y sensualidad a la fragancia. 

Con el delicioso olor de una vainilla cremosa y los acordes de la flor de tabaco que impregnan su aroma, esta fragancia de Tom Ford es un viaje sensorial hacia el ambiente sensual, íntimo y oscuro de un club de caballeros. En su centro está imbuido en notas orientales, que junto con el aroma embriagante de la savia y el cacao crean una combinación irresistible. 

Se trata de un perfume que, con sus toques cálidos y picantes y su fondo amaderado, nos recuerda a la más pura esencia del lujo y la masculinidad. Diseñado para ser usado tanto por hombres como por mujeres, esta es una de esas fragancias nocturnas con la que de seguro acertarás. 

Inspirados en la mitología griega, los perfumistas de Versace quisieron crear una fragancia que transportara a sus dueñas al momento en que Eros -dios del amor y la atracción sexual- encuentra a su verdadero amor. Y para conseguirlo, juntaron el aroma de varias flores blancas (como el azahar de limonero, el jazmín de sambac, el jazmín común y la peonía) y las complementaron con unas notas cítricas de salida, para las que usaron las fragancias de la lima siciliana, la granada y la bergamota de Calabria.

Se trata de una mezcla de tonos florales y afrutados que culminan en unas notas de fondo amaderadas, con acordes de almizcle y sandalo para un final endulzado. En definitiva, una verdadera prueba de amor convertida en uno de los perfumes más buscados de Versace, y un regalo ideal para estas fiestas. 

Durante la década de 1800 la casa Creed a menudo vestía a la realeza, y los bocetos que dibujó su diseñador, Henry Creed, todavía se encuentran en la tienda parisina de la firma. Es en este contexto que la casa decide crear 'Royal Princess Oud', un perfume que homenajea a los miembros de la familia real que apoyaron el talento de Creed como sastre, y que consagraron a su marca como un referente de lujo y realeza. 

Con un corazón de iris, jazmín y rosa, y unas notas de salida de bergamota, pomelo, pimienta rosa, grosella negra, piña y frambuesa, esta fragancia es un espectáculo de aromas florales y atalcados de lo más delicados. En su fondo tiene unos acordes amaderados procedentes del agar, la vainilla, el cedro, el almizcle y el pachulí. Un detalle perfecto para sorprender a ese ser querido tan especial.