Alarga la vida de tus cuchillos con uno de los mejores afiladores para casa

Tipos de afiladores de cuchillos

Además de estos afiladores de cuchillos que te hemos mostrado existen diferentes tipos de afiladores: piedras de afilar, chairas y afiladores manuales y eléctricos.

• Piedras de afilar: son una herramienta utilizada casi desde que el hombre comenzó a utilizar herramientas. Requiere mucha técnica y suelen utilizarlas los más profesionales ya que el proceso de afilado debe hacerse en el mismo ángulo y hay que utilizarlas con agua o aceite para ayudar a deslizar la hoja del cuchillo.
• Afiladores manuales y eléctricos: Este tipo de afiladores es el que hemos elegido par anuestra selección por su sencillez de uso y su versatilidad. Cuentan con cuchillas en forma de V y solo tienes que seguir las recomendaciones de cada fabricante a la hora de utilizarlos. Los eléctricos son muy fáciles de utilizar y hacen el trabajo solos. Se obtienen buenos resultados con ellos.
• Chaira: Las chairas son otro tipo de b fabricados, normalmente, en acero. Son una varilla larga con un mango de madera o material plástico que ayudan más a conservar el filo del cuchillo que a afilarlos como tal.

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¿Cómo afilar un cuchillo de cocina en casa?

Ya sean eléctricos o manuales se procede de la misma manera. El afilador tiene una o varias hendiduras en las que se encuentran las piedras que afilan la hoja del cuchillo. Basta con introducir el cuchillo en la hendidura y deslizar suavemente hacia uno mismo y sin demasiada presión el cuchillo. Si tiene más de un hendidura deberás ir pasando el cuchilo por cada una de ellas. De todas formas sigue las instrucciones de cada afilador para conseguir un óptimo resultado. Sobre todo recuerda: más vale maña que fuerza así que no aprietes el cuchillo como si te fuera la vida en ello.

¿Por qué es importante mantener los cuchillos de cocina afilados?

Aunque pueda parecer algo banal, un correcto mantenimiento de los cuchillos que tenemos en la cocina alargará su vida y sobre todo evitará sustos a la hora de manipularlos. Cuando un cuchillo está bien afilado, los cortes son limpios, no hace practicamente falta ejercer fuerza sobre él ya que se desliza solo si esfuerzo. Así, al tener que hacer menos fuerza y presión sobre el cuchillo y el alimento no corremos el riesgo de que el cuchillo se nos escape y nos cortemos. También seremos mucho más eficientes en la cocina ya que si nuestros cuchillos cortan bien, trabajaremos más rápido, más seguros y tendremos, además, mucha más precisión.

Como ves, todo son ventajas si tenemos nuestros cuchillos afilados correctamente.