Encuentra aquí los juegos de mesa más divertidos para disfrutar con familia y amigos

Una de las últimas novedades en cuanto a juegos de mesa se refiere y que había causado ya mucha expectación antes de su lanzamiento es Ierusalem Anno Domini (Devir). Está pensado para jugadores de más de 12 años y partidas de entre uno y cuatro jugadores.

La acción nos sitúa en Jerusalén, en la primavera del año 33 d.C. Jesús de Nazaret está a punto de reunirse con sus apóstoles y seguidores para darles un mensaje revolucionario. Cada uno de los jugadores representa a una comunidad de estos seguidores, que quieren acercarse a la Última Cena y colocarse lo más cerca posible de los asientos que ocupan el protagonista y sus doce apóstoles. Una tarea nada sencilla que se convierte en uno de tus objetivos, junto con la de colocar el mayor número de segudiores de tu comunidad en el tablero.

Un tablero que muestra diferentes ubicaciones: el mercado, el desierto y el templo, entre otros, a las que tendrás que acudir para obtener piedras, panes y peces (con pequeñas figuras de madera). Ahora bien, todo ello sin olvidarte de llevar contigo todas las parábolas que puedas. Y todo ello se hace con cartas. Al irlas jugando, tienes que ir formando una serie de combinaciones que te permitirán realizar unas acciones u otras.

El juego de Zampa Monstruos (Devir) está pensado para personas a partir de los 6 años, con lo que es fantásitico si tienes hijos y queréis jugar en familia, con partidas que no suelen superar los 15 minutos y pensado para dos personas, tres o cuatro. Ahora bien, se necesita de un teléfono móvil o tablet, por lo que es mejor que los niños no juegen solos. Sin tablero, pero con cartas, con lo que puedes llevártelo a cualquier parte.

El juego es cooperativo y su objetivo es ir completando cada uno de los niveles mientras se alimenta a todas las criaturas que aparecen en las cartas. Para ello, se necesita una app gratuita (que no requiere conexión a Internet) y con dos modos de juego: el modo historia, en el que se van resolviendo los 12 niveles en equipo (desbloqueando objetos y ubicaciones), o el modo fiesta, que aglutina un conjunto de partidas sueltas. Y se avanza dando de comer a los monstruos peludos y de colores que os vais encontrando.

Se juega por turnos, teniendo cuidado de lo que se le da de comer a cada monstruo. Es muy ameno, porque para ir viendo si el resultado es el acertado o no, se escanea el código QR que hay detrás de cada carta. Si la mezcla de alimentos no es la acertada, perderéis. Si lo hacéis bien, avanzaréis. Hay tres niveles de juego: fácil, intermedio o difícil.

El juego de cartas Exploding Kittens (Asmodée) está pensado para jugadores a partir de 7 años y partidas que integren como mínimo dos personas y un máximo de cinco. Su dinámica es muy sencilla. Se trata de ir robando cartas hasta que alguno de los jugadores saque un Exploding Kitten, que lo elimina directamente de la partida. Por tanto, la incertidumbre te acompaña de principio a fin.

Algunos lo han descrito ya como "la versión gatuna de la ruleta rusa", aunque también tiene cierto componente estratégico que puede ayudarte a salvarte de la explosión. Cada vez que llega tu turno, juegas las cartas que más te interesan de tu mano, aprovechando las habilidades especiales que contengan y, después, robas. Algunas habilidades son beneficios para tí y otras complicarle la partida al resto de jugadores. Ahora bien, tienes que tener cuidado de no saltar por los aires.

El juego de Dixit (Asmodée) se ha convertido y a en uno de los más vendidos y mejor valorados en muchas plataformas especializadas, no solo en Amazon, sacando de vez en cuando nuevas ediciones. De hecho, cuenta ya con alguna expansión. Está pensado para jugadores a partir de los 8 años de edad, aunque es perfecto para cualquier edad, en partidas de 3 a 8 jugadores que suelen durar unos 30 minutos.

El tablero de puntuación se pone al centro, pero no sirve para jugar. En tu mano sí, tienes unas extrañas cartas que te pueden suscitar todo tipo de sentimientos y con las que jugarás. El jugador que tiene el turno dice una pequeña, una frase o un pequeño relato. El resto de jugadores elige, de entre sus cartas, la que más se pueda asemejar a lo comentado. El objetivo de este es que al menos un jugador acierte y otro falle. En función de los votos del resto de jugadores se entregarán una serie de puntos.

El juego de That Time You Killed Me (Tranjis Games) nos permite hacer viajes al pasado, pero con cuidado de no quedarte atrapado en él. Está pensado para jugar en parejas, con partidas que rondan los 25 minutos aproximadamente y está recomendado para mayores de 14 años. Tanto uno como otro jugador deben viajar en el tiempo para intentar borrar la historia del otro y demostrar quién es el verdadero creador de los saltos en el tiempo. Es decir, tienes que demostrar tu invento acabando con la vida de tu oponente.

Es un juego bastante abstracto con escenarios que van poniendo reglas y herramientas diferentes a medida que se avanza, con lo que las reglas te sirven para entender el juego, pero no para saber cómo irá tu partida. Ahora bien, el orden de juego es estricto e inalterable y todo lo que hagas repecurte en tu presente y en tu futuro dentro del tablero. Tienes fichas, cartas y tableros, con lo que lo mejor es que te quede claro todo antes de dar un par de saltos hacia atrás.

El juego de mesa Cluedo (Hasbro) es ya todo un clásico. En él, los jugadores deben ejercer de detectives para, tras la aparición de un cadáver, encontrar a su asesino, el lugar donde se ha comentido el crimen y el arma con el que se ha cometido. Si no, ya sabemos, no hay culpabilidad.

Para ello, los participantes deben moverse de una habitación a otra, tirando los dados y siguiendo las normas de juego, para ir desvelando las pistas y, con un poco de lógica y mucha capacidad de deducción, llegar a la solución. Quien antes lo consiga, gana.

El juego de mesa Agrícola (Asmodée) ha sido reeditado y ha tenido desde el inicio un gran éxito. Por ello, es otro de los grandes clásicos que voy a recomendaros. Las partidas son de 1 a 5 jugadores, la edad recomendada es a partir de 12 años y las partidas, aproximadamente, duran unos 30 minutos, aunque siempre pueden alargarse un poco. Y tiene dos versiones, una familiar y otra mucho más avanzada (para la que necesitarás leer muy bien las instrucciones).

Con este juego llegamos a una humilde familia de campo en el año 1680 d.C, pleno siglo XVII, que tiene un objetivo: conseguir desarrollar una pequeña granja y que, cosecha tras cosecha, prospere los suficiente como para poder sobrevivir. Ahí entramos los jugadores.

Para ello, la acción se desarrolla en dos tableros -el propio y el común-. En el nuestro tenemos nuestra granja propia y, en el común, iremos colocando a nuestros granjeros para realizar acciones diferentes que nos hagan prosperar. Es decir, es un juego de colocación de granjeros y gestió de sus acciones, por lo que la interacción no es muy grande. El ganador será el jugador que más punto de victoria consiga al final de la partida.

Pócimas y Brebajes Jr. (Devir) es, en realidad, un juego que tiene su raíz en otro del mismo nombre, pero pensado para adultos. De nuevo, estamos ante un juego perfecto para jugar con niños a partir de 6 años, aunque con unas partidas quizás algo largas para ellos, pues duran unos 30 minutos. Se juega entre 2 y 4 personas. Y nos ha gustado mucho para pasarlo genial en familia.

Tiene su tablero y sus decenas de fichas (que se ocultan en bolsas). Con ello, cada jugador debe intentar ser el primero en alcanzar la meta en la carrera más popular que se desarrolla en la preciosa ciudad de Quedlingburg. Para ello, se debe alimentar al animal sobre el que cada uno monta, con una combinación de comida que les haga avanzar y no retrasarse.

La primera decisión que debes tomar es la del animal que quieres que te ayude a recorrer el tablero (un burro, una oveja, un cerdo o una vaca) y, tras ello, preparar vuestra bolsa de provisiones. A lo largo de la partida, por turnos, cada jugador irá sacando estas provisiones de la bolsa, de manera aleatoria, que les puede hacer avanzar, obtener rubíes para comprar comida aún más nutritiva o quedarse dormido y, por tanto, ver cómo avanzan el resto de compañeros menos tú.

El juego de Jenga (Hasbro) es un gran clásico entre los clásicos, pues es muy fácil de jugar o, al menos, de entender su dinámica. Todo depende del pulso que tenga cada uno de los jugadres. Está pensado para jugadores a partir de 6 años, lo que lo convierte en una opción ideal para toda la familia, sin número mínimo o máximo de jugadores y con una duración media de 5 a 15 minutos, aunque todo dependerá de lo rápidos o lentos que vayáis pasando de un turno al siguiente. Se trata de ir quitando los 54 bloques de madera de los que se compone sin que la torre que se ha formado se desmorone.

El juego de mesa Star Wars Villainous (Ravensburger) sigue la estética y la dinámica de otros muchos que le han precedido y cuyos protagonistas son los villanos del mundo Disney. En este caso, al haber sido la saga comprada por la factoría, no había excusa. Está pensado para jugadores de más de 10 años, de entre dos y cuatro participantes, con partidas de duración aproximada de 40 minutos.

Cada jugador representa a un personaje - Darth Vader, General Grievious, Asajj Ventress, Moff Gideon y Kylo Ren- y a su historia. Puedes tener la posibilidad de usar la fuerza o ser el líder de un tremendo ejército. Habilidades que te harán desarrollar una estrategia para, por un lado, conseguir tu objetivo y, por otro, impedir que los demás consigan el suyo. La mecánica del juego es ir seleccionando un conjunto de acciones disponibles en tu propio tablero (no hay tablero común) y el mazo de cartas que tienes en la mano. Además, deberías ir moviendo a tu personaje por el tablero para evitar los bloqueos que otros jugadores pueden lanzarte.

Con un sinfín de valoraciones en positivo, el juego de mesa Beat That! (Gutter Games) se puede convertir en un básico en las fiestas que organices con tu familia o amigos. Está diseñado para partidas de dos a ocho jugadores y personas a partir de 9 años. La duración de cada partida es muy variada, todo depende de lo que avancéis y paréis.

Su dinámica es sencilla, se trata de ir superando cada una de las pruebas indicadas. Todos haréis las mismas, pero cada uno debe apostar, en su turno, si será o no superada. Si aciertas, acumularás puntos. Es un juego social con 160 pruebas distintas y ridículas que puede fomentar la competitividad entre los jugadores, pero, sobre todo, el desafío a uno mismo. Se puede jugar de manera individual, en parejas o por equipos.

Para los amantes de los juegos de estrategia no podemos dejar de recomendaros uno de los grandes clásicos que ha enamorado a todo aquél que lo ha probado y que se ha convertido en un éxito de ventas, Catán (Devir). Admite entre dos y cuatro jugadores, con una edad recomendada a partir de 10 años y con partidas que duran una media de 75 minutos.

El objetivo es conseguir crear ciudades y la ruta comercial más larga entre ellas, para lo que vas recolectando los materiales y herramientas necesarias. Y, para conseguir esas materias primas, debes ir avanzando por el tablero y construyendo tus poblados y ciudades. Hay terrenos fértiles y otros que, como el desierto, es más un impedimento que puede ver tu táctica truncada. El objetivo final es colonizar la isla antes que el resto de jugadores, siendo el primero en llegar a los 10 puntos de victoria.