Hemos probado: siete cremas hidratantes para pieles grasas y mixtas

Uno de los aspectos que siempre busco antes de invertir en una crema hidratante es que tenga base acuosa para que funcione mejor con mi tipo de piel, delicada y con tendencia acnéica.

Desde que descubrí hace casi cuatro años Dramatically Different Hydrating Clearing Jelly Anti-Imperfections de Clinique con el Activo Concentrado para Imperfecciones, siempre la tengo en mi baño para aplicármela sobre todo por las mañanas antes de salir de casa.

Es un híbrido de aqua-gel con ácido salicílico y sin aceites, es ideal para los días de calor, pero también cuando tu piel necesita esas dosis extra de hidratación ya que se disuelve rápidamente y con facilidad.

He estado utilizando Effaclar Mat de La Roche Posay, un perfecto ritual de mañana y noche, durante esas semanas en las que mi piel ha estado más alterada de lo normal. Me ha sorprendido no solo por su cómodo packaging para llevarlo en el bolso, también por su textura más densa que ayuda a combatir los temidos brillos y reducir el tamaño de los poros. Una hidratante matificante y de larga duración destinada a quienes tienen la tez grasas con tendencia acnéica.

Además en su formulación encontramos agua termal de La Roche-Posay, una de las claves estrella de sus productos con las que trabajar las imperfecciones.

Some By Mi AHA/BHA/PHA 30 Days Miracle Cream ataja con su composición distintas problemáticas comunes en personas de piel grasa: exceso de sebo, inflamación, cicatrices de acné y los indeseados puntos negros.

Para ello, fue formulada con centella asiática al 70%, un antibacteriano que además favorece la producción de colágeno, más otros componentes claves para luchar contra el acné y decir adiós a esa sensación oleosa: extracto de árbol de té, niacinamida y una combinación ácidos exfoliantes (AHA, BHA y PHA) que eliminan las células muertas y evitan la obstrucción de los poros.

Eso sí, recomiendo utilizarla junto con el sérum de la misma línea para conseguir resultados óptimos.

Como has leído antes, es posible tener una crema hidratante en tu tocador que no contenga ni un solo gramo de aceite. Es el caso del fluido matificante Eucerin DermoPure Oil Control, de Eucerin, una crema ligera de tinte nude que se diluye y se absorbe en contacto con las pieles grasas.

De todos los productos que he probado, este destaca por su poder seborregulador gracias a su composición de ácido salicílico, con acción antibacteriana y comedolítica, y Licochalcona A (extracto de la planta de regaliz), que calma las rojeces e irritaciones.

Es normal que las mujeres de piel grasa también experimentemos irritaciones y rojeces, que pueden estar provocadas por una exfoliación excesiva del rostro o el desarrollo de las mismas imperfecciones, propensas a inflamarse. La crema hidratante Avéne Cleanance Hydra está especialmente formulada para rostros jóvenes con sequedad causada por el uso constante de tratamientos antiacné.

Si es tu caso, tras el uso continuado de dicho producto notarás tu cutis mucho más nutrido y agradable al tacto. Contiene coco, manteca de karité y aceite de jojoba por lo que, en este caso, está más indicada para pieles normales o mixtas con brotes de acné ocasionales.

Asegurarte de mantener tu piel hidratada durante todo el día no es nada sencillo, pero esta fresquita Emulsion Hydra-mat de Embryolisse ha sido la solución que necesitaba. Su textura acuosa en forma de gel es fina y deja respirar la tez.

Asimismo resulta de lo más reconfortante al aplicarla sobre el rostro, ya que se trata de un tratamiento requilibrante para las pieles mixtas que suelen tener brillos. Gracias a sus activos de origen natural, la manteca de karité, el aceite de albaricoque, almidón de tapioca y vitamina E absorbe los excesos de sebo durante horas.

El invierno resulta confuso para la piel grasa, pues esta se nos puede resecar al punto de segregar incluso más sebo, una reacción espontánea de las glándulas para mantener la tez hidratada. Barr Centella Calming Barrier Cream se muestra más densa que las anteriores formulaciones acuosas y está compuesta en un 64% por centella asiática para calmar y reparar la piel.

Su aporte novedoso -y el secreto de las coreanas para tener una piel de porcelana- reside en el uso de panthenol (vitamina B5) y escualano, esenciales para proteger la barrera y retener la hidratación. ¡Y que no te asuste el 1% de aceite de jojoba! A diferencia de otros aceites, este consigue nutrir en profundidad pieles grasas sin congestionar los poros.