Este mes de marzo hay una fecha marcada en tu calendario. Bueno, quizás dos. Además de la llegada de la primavera, que todos esperamos con muchas ganas, un par de días antes celebraremos el Día del Padre. En la mayoría de los casos, nos juntaremos con los nuestros en torno a una mesa, les llenaremos de cariño (que, como protagonistas, es lo que se merecen) y les daremos un paquete bien envuelto que abrir. Queremos sorprenderles. Y aunque siempre pensemos en lo mismo -calcetines, una corbata o una botella de vino-, desde ¡HOLA! Cocina hemos pensado en esos papás sibaritas que adoran las sobre mesas o tomarse una buena copa a media tarde. Con whisky, tequila, ron, ginebra o coñac, hemos pensado en todos con esta selección muy premium.
Herencia británica
Mombasa fue una ciudad costera situada frente a la Isla de Zanzíbar que, por su posición estratégica, se convirtió en puerto principal de toda África Oriental. Allí se creó el primer club social privado para los oficiales británicos y allí comenzaron a servirse los primeros Mombasa Club Gin & Tonic del país, con esta ginebra exclusiva especialmente destilada para el consumo de sus socios. Una fórmula que se conserva en esta botella, con base de enebro y notas especiadas de casia y cominos.
Dile que lo combine con…un poco de limón, azúcar líquido, clara de huevo y Angostura Bitter.
Con aire gallego
Quizás demasiado floral para las narices masculinas, pero con un cierto gusto a uno de los vinos de la tierra de la que procede, el albariño, su frescura hace que esta ginebra de producción española sea perfecta para todos los paladares. Se inspira en el viento de Galicia, ese que anuncia el buen tiempo y que parece haberse adelantado, para contarnos que el verano está más cerca de lo que pensamos.
Dile que lo combine con…el zumo de medio limón, un poco de jengibre y un toque de albariño.
Más que un adolescente
Los doce años marcan, en la mayoría de las generaciones, la entrada a la adolescencia. Sin embargo, este The Balvenie Doublewood 12 años, lleva mucho tiempo envejeciendo en barricas de bourbon y jerez con uno de los procesos más artesanales del mundo, gracias a una única combinación de alquimia natural, una cebada de cultivo propio y siglos de experiencia. Se trata de un single malt muy valorado en el mundo de los destilados, gracias al cuidado y mimo que la casa marca con una tradición más que contrastada.
Dile que lo combine con…con un cubito de hielo, para apreciar su sabor ahumado.
Para los románticos
Este vodka ultra premium francés se viste de dorado para una edición limitada con el nombre White Grape, que ya nos adelanta su sabor fresco con delicadas notas florales, toques de cítricos crujientes y de una de las frutas del verano que estamos deseando que llegue: el melón. Se destila cinco veces para asegurar su calidad, dando como resultado un destilado muy sedoso.
Dile que lo combine con…un chorrito de champagne y crema de Cassis.
Un viaje muy exótico
Kavalan es la primera destilería taiwanesa del mundo, que comenzó hace unos años a elaborar este inimitable whiskey de malta cuyo nombre rinde homenaje a una tribu homónima dedicada a la agricultura. Tiene un perfil muy afrutado, fresco y algo especiado, debido a que se crea con cebada sin maltear procedente de Escocia. Sin embargo, es el clima subtropical de la zona el que le regala una identidad propia.
Dile que lo combine con…con un poco de licor de plátano y unas nueces.
Magia y misterio del mundo Maya
Este ron, reconocido como uno de los mejores del mundo, tiene un sabor muy particular con notas de nuez, vainilla y cacao. Alimentos que ya encontrábamos en la cultura maya. Tiene un añejamiento de veinticinco años a más de dos mil metros de altitud, lo que le da una complejidad de aromas y sabores asombrosa, pero sin perder su equilibrio que, en nariz, descubre una amplia gama de maderas y pasificados. Lo han llegado a llamar el coñac de los rones.
Dile que lo combine con…un poco de hierbabuena, azúcar y un poco de hielo, como si fuese un mojito.
Edición Especial
Otro ron, meloso pero de un sabor final bastante intenso, es este Reserva Exclusiva Ron Diplomático que, para el Día del Padre se presenta en un pack de edición limitada con una elegante billetera, para que puedas hacer un regalo dos en uno. Tiene un gran aroma a piel de naranja, azúcar moreno y canela, combinando notas de roble envejecido y sirope. Aún a pesar de su sabor dulce, está muy equilibrado gracias al proceso artesanal de doble destilación en alambiques de cobre.
Dile que lo combine con…un splash de soda, un hielo y una zest de naranja.
Un destilado bien frío
Porque viene del norte, es un auténtico homenaje a Siberia (de ahí, que su símbolo sea un mamut) y sus notas se descubren servido con mucho hielo. Se fabrica a los pies de las montañas de Altai, bajo la atenta mirada y cuidados de unas manos expertas que han heredado una artesanía propia de las destilerías más antiguas de Siberia. Es un trago fuerte, como los que se atreven con una exploración polar y que les inspira.
Dile que lo combine con…unos granos de café y un shot de expresso.
Que no falte un tequila
Y, además, que sea uno como este: maduro, de color amarillo intenso, con un sabor muy particular pero suave y elegante. El chocolate negro, la vainilla y la cena se descubren en un trago muy diferente del que estamos acostumbrados cuando hablamos de una de las bebidas mexicanas por excelencia. Se destila en alambiques forrados de cobre, pero envejece en barriles durante un mínimo de ocho meses; de ahí, su aroma.
Dile que lo combine con…agua mineral con gas, un poco de agua de rosas y bayas de Goji.
Mars Kasei
Japón también quería tener su propio whisky y desde Shinshu Destillery comenzaron a elaborar este destilado, añejado y embotellado a más de 800 metros de altura, con unas condiciones atmosféricas algo extremas y un agua baja en minerales. Es una mezcla de malta y de grano, con un proceso de añejamiento realizados en diferentes barricas de whisky japonés que le dan su sabor a miel, manzana verde y uva blanca. Dicen que, si lo mantienes en boca, además, encontrarás cierto gusto a cítricos y vainilla.
Dile que lo combine con…un poco de lima, limón, naranja y ginger ale.
Por último, un elegante coñac
No debemos olvidarnos de un buen coñac, porque hay padres que aún buscan esa mezcla de aromas -florales, afrutados y especiados-, con una textura opulenta y una gran densidad, pero suave. Para esos paladares que buscan un trago aterciopelado y muchos (muchos) matices, elegimos este coñac envejecido en barriles de roble de Limousin y elaborado en una de las zonas más exclusivas de Francia.
Dile que lo combine con…un poco de queso parmesano como acompañamiento; pero él, solo.