La dieta flexitariana, que consiste en comer 'casi' vegetariano, también se considera una buena manera de comer sano y perder peso. En este tipo de alimentación predominan los alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, hortalizas, cererales, legumbres, semillas y frutos secos). Eso sí, hay que intentar evitar carencias nutricionales como el déficit de vitamina B12, que solo se encuentra en los alimentos de origen animal.