El reino de Bután, conocido por ser uno de los lugares más felices del mundo, ha vivido esta semana una ocasión de esas que se marcan en el calendario. La reina Jetsu está de viaje oficial y no ha querido desprenderse de sus hijos, los pequeños Jigme Namgyel y Ugyen, de cinco y un año respectivamente, así que se ha ido con ellos y los niños se han convertido en los protagonistas absolutos de la ocasión.
Las imágenes han tenido lugar durante una visita Trongsa (que quiere decir 'villa nueva') y el distrito de Bumthang, en donde han estado acompañados también por la princesa Euphelma (hermana del Rey) y su marido y otros miembros de la familia
Uno de los protagonistas indiscutibles de este viaje ha sido el pequeño Ugyen, que nació el 19 de marzo de 2020, sin lugar a dudas el mejor regalo del Rey por el Día del Padre en medio de la pandemia que ya comenzaba a asolar al mundo entero, a pesar de que en Bután ha habido menos de 3.000 casos desde que empezó a extenderse la enfermedad. El niño, cuyo nombre fue anunciado meses después de su llegada al mundo, ya se comporta como un verdadero principito. Vestido con las tradicionales telas de este país que colinda con el Himalaya, el hijo menor de los Reyes se ha movido por los paisajes con soltura, curiosidad y desparpajo, interesándose por sus alrededores como corresponde a un niño de su edad
Jigme Namgyel es el heredero a la corona, y a sus cinco años ya le hemos visto aprender las maneras y las tareas que le corresponderán en unos años. Acompañado en todo momento de su madre, la reina Jetsu, el principito ha demostrado mucha paciencia también con su hermano pequeño, que en ciertas ocasiones le ha quitado por completo el centro de atención.
En esta imagen, Ugyen agarra la bufanda de uno de los ciudadanos presentes, interesándose quizás por los flecos que colgaban de ella, mientras su madre tira de él para intentar que mantenga las distancias que piden los protocolos covid
Jigme Namgyel ha estado también pendiente de su hermano menor, enseñándole algunas de las tradiciones que han completado durante su viaje, como el encender velas en uno de los templos a los que accedieron.
En Trongsa, de donde son los padres de la Reina, el príncipe recibió una ofrenda hecha en su nombre en honor a su primera visita a estas tierras
La reina Jetsu y la princesa Euphelma se han sentado juntas para observar algunas de las tradiciones que han empezado en estos días en la ciudad de Trongsa, celebraciones que se alargan hasta mediados de enero y que incluyen actos y citas en los 30 templos que están repartidos por toda la zona
La Reina ha estado siempre pendiente de sus hijos, con quienes ha posado en postales tan increíbles como esta, con las montañanas de Bután de fondo formando un paisaje prácticamente irreal
La mujer del Rey Dragón asistió a varios encuentros, entre ellos este con los participantes en varios programas de educación en diversas habilidades. Ya en agosto el rey Jigme, durante una visita en solitario, estuvo conociendo las tareas del centro y a muchos de los estudiantes
El príncipe Ugyen fue agasajado por las gentes de Trongsa, la zona a la que pertenece la familia paterna de la reina Jetsu, y le fueron entregados amuletos relacionados con el budismo como símbolo de su dedicación
Y aunque el príncipe Ugyen se llevara toda la atención, el príncipe Jigme Namgyel se demostró como un heredero digno de sus padres