Filiberto de Saboya, nieto del último Rey de Italia y actual pretendiente al trono extinto, comunicaba el jueves por la noche el regreso de la monarquía tras interrumpir la programación de las cadenas de Mediaset. Muchos italianos tildaron su mensaje de provocación, antes de descubrirse que se trataba de una estrategia publicitaria para la promoción de la tercera temporada de The Crown.