Los romances reales que comenzaron en los Juegos Olímpicos
Desde el Rey y la Reina de Suecia hasta el príncipe heredero de Dinamarca y su bella mujer australiana
Carlos Gustavo de Suecia conoció a la que más tarde se convertiría en su mujer, Silvia Sommerlath, durante los Juegos Olímpicos de 1972 celebrados en Múnich
Carlos Gustavo y Silvia de Suecia han tenido tres hijos y cinco nietos. Además, vieron cómo el círculo de su historia de amor se completó cuando su hija mayor, la princesa Victoria se casó con Daniel Westling el 19 de junio de 2010, el 34 aniversario de su boda
El romance entre la princesa Ana de Inglaterra y su primer marido, Mark Phillips, empezó dentro del circuito deportivo, donde ambos competían en la máxima categoría ecuestre
Durante su entrevista de compromiso en 1973, le preguntaron a Mark si se puso nervioso al tener que proponer matrimonio a una Princesa. "El hecho de que la chica en cuestión sea una Princesa no la hace diferente en absoluto", dijo
Con motivo del 40 cumpleaños de Federico de Dinamarca, se publicó un libro en el que habló de su romance. "Fue amor a primera vista", dijo. "Tan pronto como la vi, sentí que éramos almas gemelas", añadió
El futuro rey de Dinamarca conoció a su mujer en un concurrido pub de Sídney, el Slip Inn, el 16 de septiembre de 2000
La infanta Cristina encontró al amor de su su vida, Iñaki Urdangarin, durante los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996
Alberto y Charlene de Mónaco tuvieron su primera con motivo de la competición Mare Nostrum celebrada en el principado cuando la nadadora sudafricana Charlene tenía solo 22 años
La boda del príncipe Alberto y la princesa Charlene tuvo lugar en el verano de 2011 y se convirtió en un gran acontecimiento con decenas de miembros de la realeza