A punto de cumplir su sexto mes de embarazo, la princesa presidió la 150ª edición de los premios que entrega cada dos años la asociación de ingenieros suecos, y que tuvo lugar en el Technical Museum de Estocolmo, y fue la encargada de entregarle el premio Polhem, el más antiguo y prestigioso en el campo de la innovación tecnológica, al inventor Georgios Psaros
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El pasado martes, la heredera sueca asistió a la gala de los premios Anders Wall en la Universidad de Uppsala y el recibimiento no pudo ser más caluroso, ya que todos se preocuparon por su embarazo y sus sensaciones como madre primeriza